COFO-2001/8 |
COMITÉ DE MONTES |
Tema 8 d) del programa provisional |
15º período de sesiones |
Roma, Italia, 12-16 de marzo de 2001 |
PROPUESTAS PARA LA FUTURA EVALUACIÓN DE LOS RECURSOS FORESTALES MUNDIALES (ERF) |
Nota de la Secretaría |
1. La Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales 2000 (ERF 2000) ha sido un proceso participativo en el curso del cual se ha elaborado y realizado el estudio de referencia más completo sobre los recursos forestales de todos los países que se haya efectuado hasta la fecha. Se ha recopilado y analizado la información disponible sobre la extensión, composición, protección y utilización de los bosques de todos los países. También se ha prestado una atención especial a la estimación de la variación de los recursos forestales y a la determinación de los distintos factores que la han ocasionado. La ERF 2000 ha sido un proceso transparente en el sentido de que se han publicado todo el material de referencia y sus análisis y de que se invitó a todos los países a participar en el proceso.
2. A pesar del esfuerzo realizado, los resultados de la ERF 2000 indican que la información sobre los bosques y el sector forestal sigue siendo insuficiente para afrontar todas las necesidades a escala mundial. Aunque la serie de informes y artículos que se ocupan del sector forestal ha aumentado considerablemente en el transcurso del último decenio, lo cierto es que en conjunto la fuente global de información no ha experimentado mejoras importantes en los últimos veinte años. El hecho de que, al parecer, se hayan utilizado en mayor medida información y análisis no comprobados entraña el riesgo de que la adopción de decisiones se base en unos supuestos inexactos sobre la evolución de los bosques y el sector forestal.
3. Sólo un grupo reducido de países en desarrollo lleva a cabo inventarios forestales continuados con reconocimientos sistemáticos sobre el terreno, necesarios para proporcionar la información de mayor calidad. De hecho, la inmensa mayoría de los países no dispone de inventarios comparables en el tiempo, lo cual supone un obstáculo para hacer un examen cuantitativo y cualitativo de los procesos de variación de los bosques. Es posible que las metodologías utilizadas al realizar los inventarios no sean adecuadas para evaluar los parámetros cualitativos pertinentes para la ordenación forestal sostenible, limitando así su utilidad para la formulación de las políticas forestales.
4. Ahora, la comunidad internacional demanda mediciones más detalladas, puntuales y precisas de los recursos forestales, incluido el seguimiento de las variaciones registradas en los bosques. Esta información podría utilizarse para abordar cuestiones tales como la retención de carbono, la diversidad biológica y la ordenación forestal sostenible. Por otra parte, los inventarios y los mecanismos de elaboración de información necesarios para estudiar y controlar los bosques del mundo de manera sistemática son todavía insuficientes para satisfacer la demanda de información.
5. Existe un gran interés por disponer de información sobre los bosques y la actividad forestal, lo que se explica por los numerosos y diversos procesos y funciones para las que se utiliza. A nivel nacional, se requiere información de calidad para la formulación, aplicación y seguimiento de las políticas, sobre todo respecto de algunos usos complejos de la tierra. Sin disponer de una información adecuada sobre los bosques es imposible perfilar las opciones de gestión de manera fiable o evaluar los efectos de decisiones anteriores. A escala internacional, varios procesos, especialmente los que se refieren al ciclo del carbono y la diversidad biológica, necesitan aportaciones de calidad para los modelos y análisis, así como para los sistemas de seguimiento. Como ya se ha dicho, en la actualidad carecemos casi por completo de ese tipo de información.
6. A la luz de esa constatación, se proponen las siguientes directrices generales y objetivos para las futuras evaluaciones mundiales de la FAO:
7. Tradicionalmente, las evaluaciones mundiales se han llevado a cabo con un grado importante de colaboración directa de los países, en forma de la aportación de documentación y análisis por corresponsales nacionales. Este excelente mecanismo garantiza la participación de los países en el proceso de evaluación y asegura a la FAO la posibilidad de disponer de la información más reciente. Previsiblemente, este sistema seguirá proporcionando la información necesaria para las evaluaciones mundiales.
8. Para conseguir una amplia difusión del gran volumen de información aportado por los países y garantizar la transparencia en la presentación de los informes, la ERF 2000 ha incluido el establecimiento de un sistema de información muy avanzado. Uno de los principios que inspiran esta iniciativa es el de asegurar que exista un vínculo directo entre los resultados notificados por la FAO y la información facilitada por los países. El sistema de información forma parte del Sistema de Información Forestal (FORIS) del Departamento de Montes e incluye información nacional sobre aspectos no relacionados con la ERF. Se puede acceder a él a través del sitio web (www.fao.org/forestry/fo/country/nav_world.jsp).
9. Una función evidente de las futuras evaluaciones mundiales es la de mejorar, actualizar y ampliar la información sobre los países a medida que se pueda disponer de nuevos datos. Previsiblemente, esta tarea comprenderá a) notificaciones de información sobre los países actualizada frecuentemente, basada en un mantenimiento permanente de las bases de datos, y b) la presentación de informes por todos los países a intervalos periódicos (5-10 años).
10. Para solucionar el problema de la falta de la información básica necesaria para la ordenación forestal sostenible detectado en la ERF 2000, se está elaborando el marco para un Estudio Forestal Mundial (EFM). El EFM formaría parte del Programa de Evaluación de los Recursos Forestales y complementaria la compilación y análisis de los informes y la información nacionales. Además, abordaría la necesidad de crear capacidad para la realización de inventarios forestales y la labor de análisis de la información proporcionando y respaldando la adopción de un enfoque sistemático ajustado a las normas internacionales, al que se pueden añadir las necesidades nacionales de información. El EFM sería una empresa ambiciosa que se llevaría a cabo gracias a la capacidad de la FAO para coordinar y facilitar las iniciativas relativas a la compilación de información mundial. En este mecanismo se atribuye una gran importancia a la invitación a los asociados para que realicen el estudio a través de proyectos nacionales independientes.
11. La metodología que se ha previsto para el EFM (véase el documento de trabajo 28 de la ERF en http://www.fao.org/forestry/fo/fra/index.jsp , en Publicaciones) contempla un muestreo mundial, técnica ya utilizada en los inventarios forestales nacionales existentes. La razón por la que se propone este procedimiento es la necesidad de realizar las mediciones u observaciones en el nivel pertinente de gestión, a fin de que los datos sean útiles para realizar análisis globales. Además, la información sobre muchas variables de interés (especialmente sobre aspectos biológicos, socioeconómicos y de gestión de los bosques) sólo se puede obtener sobre el terreno. Desde hace mucho tiempo se dispone de los conocimientos necesarios para diseñar ese tipo de inventarios y existe también la metodología (mediciones, observaciones y entrevistas) necesaria para evaluar el gran número de variables relativas a los bosques y la actividad forestal que tienen importancia para los procesos nacionales e internacionales. El EFM pretende hacer esa labor (y aplicar las nuevas metodologías que puedan surgir) a escala mundial y, asimismo, fomentar la creación de capacidad actuando en cooperación con los países.
12. Los elementos que justifican el EFM son la función y el mandato de la FAO respecto de la compilación, análisis y difusión de información, y las tres estrategias esenciales del Departamento de Montes, consistentes en a) constituir un foro neutral para el diálogo sobre cuestiones técnicas y normativas y ser una fuente de información mundial; b) establecer unas prioridades bien definidas en función de las necesidades internacionales, que en el momento presente consisten en disponer de sistemas de información, evaluaciones mundiales y estudios de perspectivas; y c) forjar asociaciones con los Estados Miembros, organizaciones internacionales, ONG y el sector privado para llevar adelante el programa forestal. El EFM se enmarcaría en esas tres estrategias.
13. El EFM se llevaría a cabo bajo la dirección de cada país (o de grupos de países) y de las instituciones forestales nacionales. Diseñar el estudio ajustándose a las fronteras nacionales tendría la ventaja de a) facilitar la creación de capacidad nacional para la ejecución, b) poder vincularlo con las cuadrículas de reconocimiento existentes a nivel nacional y c) posibilitar la formulación de proyectos para el componente de campo sobre una base bilateral (o de otro tipo). Al margen de los estudios nacionales, una secretaría y un equipo de ejecución coordinarían y facilitarían la labor desde la FAO. La Organización también se ocuparía de la gestión de la información pertinente en el contexto internacional y de difundir los resultados.
14. En la fase actual de elaboración del EFM se está formulando la metodología, particularmente del componente del estudio sobre el terreno, y se están manteniendo conversaciones con instituciones forestales nacionales sobre cuestiones relacionadas con el diseño y la ejecución.
15. Las propuestas que se han presentado en los párrafos anteriores se pondrían en práctica en el marco del Programa de Evaluación de los Recursos Forestales de la FAO. Se fortalecerían los vínculos con otras actividades del Departamento de Montes por cuanto el alcance de la información que se ha de recopilar, analizar y difundir abarca un amplio conjunto de temas forestales (en la ERF 2000 se incluyeron más de diez temas, relativos a los recursos, la ordenación y los productos). Además, se ampliará la cooperación con instituciones nacionales e internacionales, particularmente para la ejecución del EFM. No será necesario consignar en la FAO un volumen considerable de recursos financieros adicionales. Como en todas las iniciativas del programa ERF, la FAO tratará de establecer un marco de cooperación con distintos países y donantes y con otras organizaciones que deseen participar en el proyecto.
16. Tal vez el COFO deseará examinar la propuesta sobre la futura evaluación de los recursos forestales mundiales a la luz del mandato de la FAO de recopilar, analizar y difundir información y en apoyo de otras actividades del programa forestal, como la ordenación forestal sostenible y la formulación de políticas forestales nacionales.