Aproximadamente 2 600 millones de personas dependen de la madera y otros combustibles tradicionales para cocinar en el hogar
Los dendrocombustibles son una fuente de energía potencialmente renovable y neutra en relación con las emisiones de carbono, y no hay duda de que desempeñarán un papel relevante en la respuesta a las futuras necesidades de energía. Sin embargo, también tienen importantes repercusiones negativas, sobre todo en los países en desarrollo. La madera es un combustible asequible para las personas que no tienen acceso a otras fuentes energéticas, pero lleva tiempo recolectarla y, por lo tanto, suele conllevar un enorme costo de oportunidad, en especial para las mujeres. El amplio uso de dendrocombustibles tradicionales es una fuente importante de contaminación del aire en los hogares, que constituye el tercer principal factor de riesgo de la carga de morbilidad a escala mundial72 y que, según las estimaciones, es responsable de 1,63 millones a 3,12 millones de muertes prematuras al año73. El consumo de dendrocombustibles también podría suponer una amenaza para los bosques del mundo, ya que podría actuar como factor impulsor de la deforestación y la degradación74. Una tercera parte de la población mundial —esto es, alrededor de 2 600 millones de personas— dependía de los combustibles tradicionales, por ejemplo, madera, carbón vegetal y residuos agrícolas, para cocinar en el hogar en 2019; la biomasa y el carbón vegetal combinados representaron aproximadamente el 88% de los combustibles tradicionales para cocinar utilizados en los países de ingresos medios y bajos en ese año75. Si los países adoptan solo las políticas actualmente establecidas, casi una tercera parte de la población mundial todavía no se habrá pasado a la energía limpia para cocinar para 2030 y, por tanto, dependerá del uso tradicional de los dendrocombustibles y otros tipos de energía derivada de la biomasa76. La mayor dependencia de los dendrocombustibles se registra en África (63% de los hogares; más del 90% de toda la madera que se corta en África se utiliza como dendrocombustible77), seguida de Asia y Oceanía (38%) y América Latina y el Caribe (15%)78.
Debido al alcance considerable de los dendrocombustibles en diversos sectores y en la vida de tantas personas, es fundamental disponer de datos precisos para entender mejor las tendencias e informar a los encargados de formular las políticas. La producción y el comercio de pellets de madera, que están relativamente bien documentados, se asocian a una proporción de dendroenergía cada vez mayor en el consumo energético final total. Sin embargo, los datos sobre la recolección informal de madera para su uso como combustible y sobre la producción ilegal de carbón vegetal son escasos. De una comparación entre la información recogida en FAOSTAT y los datos obtenidos a partir de una búsqueda sistemática por país realizada en 145 países se desprende que la producción de dendrocombustibles per cápita en África y Asia se revisará al alza en la elaboración de futuros modelos.
Al menos 3 500 millones de personas utilizan productos forestales no madereros
El uso de subsistencia de los bosques y las tierras boscosas y su biodiversidad asociada puede ser más importante para la salud, la alimentación, los medios de vida y las culturas locales que los productos que se comercializan. Las estimaciones basadas en estudios empíricos recientes del número de usuarios de productos forestales no maderables (definidos como organismos y materiales biológicos silvestres, ya sean nativos o no nativos, distintos de la madera de alto valor, recolectados de territorios y hábitats) establecen el valor más bajo y el valor de la mediana en 3 500 millones y 5 760 millones de personas, respectivamente79. Se calcula que el valor de los productos forestales silvestres recolectados en Europa (con inclusión de los productos comercializados en el mercado formal e informal y los productos destinados al consumo propio) asciende a 23 300 millones de EUR al año, lo que supone un 71% del valor de la producción anual de madera en rollo80.
Algunos PFNM están propiciando industrias relacionadas con la cosmética, la alimentación y la salud y el bienestar que mueven millones, o incluso miles de millones, de dólares, si bien pueden no estar reflejados en las cuentas nacionales porque pertenecen a categorías que abarcan tanto los volúmenes recolectados como los cultivados. Por ejemplo, en FAOSTAT81 se presenta información sobre la producción y el comercio de la nuez del Brasil (obtenida del árbol Bertholletia excelsa), que crece en toda la Cuenca Amazónica y se recoge en el medio silvestre principalmente en tres países: Bolivia (Estado Plurinacional de), el Brasil y el Perú. El valor de las exportaciones de nueces del Brasil se situó en 373 millones de USD a escala mundial en 2019. Asimismo, FAOSTAT contiene datos sobre la producción y el comercio de la nuez de karité (utilizada para producir manteca de karité) obtenida del árbol Vitellaria paradoxa, una especie de amplia distribución que se encuentra desde el Senegal hasta Uganda. Se presume que la mayoría de las nueces de karité utilizadas para elaborar manteca de karité se recolectan en el medio silvestre. Seis países de África occidental declararon la exportación de un total de 14 millones de toneladas de nueces de karité en 2007-2017, si bien el volumen de comercio real podría ser superior debido a que otros países exportan este producto con códigos de comercio más genéricos. Se estima que entre el 60% y el 90% de las especies de plantas medicinales que se comercializan a escala internacional se recoge en el medio silvestre82.
La fauna silvestre de los bosques desempeña una función importante en la seguridad alimentaria, en especial en los pueblos remotos de los trópicos y subtrópicos. Se calcula que el consumo de carne de caza es de 5 millones de toneladas al año en la cuenca del río Congo y de 1,3 millones de toneladas en la Cuenca Amazónica83, lo que satisface, de media, entre el 60% y el 80% de las necesidades diarias de proteínas84. En Venezuela (República Bolivariana de), un estudio llevado a cabo en 2012 reveló que la caza servía principalmente para fines de subsistencia en las comunidades indígenas y aportaba del 40% al 100% de la carne consumida85.
Los alimentos a base de animales y plantas silvestres pueden mejorar la calidad de las dietas de sus consumidores y generar ingresos para sus vendedores o comercializadores. La producción de estos alimentos de origen silvestre es difícil de cuantificar por diversos motivos, como la falta de unidades normalizadas, las diferencias estacionales en las pautas de recolección y el elevado número de especies. El perfeccionamiento de los datos sobre recolección y consumo de especies silvestres comestibles permitiría entender mejor el papel de los bosques en la diversidad dietética sostenible y la seguridad alimentaria.
En muchos países tropicales, las personas que viven junto a bosques obtienen de ellos una cuarta parte de sus ingresos aproximadamente
Los sistemas basados en los bosques y los árboles pueden contribuir tanto directa como indirectamente al empleo y los ingresos, así como aliviar las repercusiones de las perturbaciones externas86. En 24 países tropicales y subtropicales estudiados del África subsahariana, América Latina y Asia, los bosques representan del 20% al 25% de los ingresos de los hogares en las comunidades que viven junto a ellos, una cifra que se encuentra a la par con la contribución de la agricultura87. En un análisis comparativo mundial se concluyó que el 77% de los hogares rurales examinados se dedicaba a la recolección de especies silvestres comestibles88. Los mercados locales en el noreste de la India comercian con más de 160 especies de plantas y hongos silvestres —la mayoría recolectada en bosques y tierras boscosas—, que aportan hasta el 75% de los ingresos totales de algunos hogares y desempeñan una función integral en la seguridad de los medios de vida89. Alrededor del monté Camerún, en el país homónimo, la recolección de productos forestales del medio silvestre, sobre todo para el consumo humano, contribuye en aproximadamente un 41% a los medios de vida locales y las especies nativas, en un 45%; hogares de todos los estratos económicos participan en estas actividades90.
Los bosques y los árboles son importantes para los valores y las tradiciones espirituales y culturales de muchas comunidades —en especial los pueblos indígenas— y personas91. Resulta difícil cuantificar estos factores no materiales, pero su importancia para el bienestar humano es evidente.
Los bosques y los árboles son fuentes de alimento, forraje, combustible y otros productos que pueden recolectarse en momentos que, sin ellos, resultarían duros y pueden consumirse en el hogar o venderse, lo que permite distribuir el consumo y los ingresos a lo largo de las estaciones y los años y, con ello, mitiga el riesgo de que la población pobre se sume aún más en la pobreza y de que quienes no se encuentran en situación de pobreza caigan en ella. El papel de los bosques reviste especial importancia para las personas pobres de zonas rurales, quienes a menudo no tienen acceso a otras formas de seguro y protección social y dependen de medios de vida que están sujetos a perturbaciones externas, como la destrucción de los cultivos por parte de la flora y fauna silvestres y la variabilidad del clima92. La gestión de riesgos es cada vez más importante en vista del cambio climático y otras perturbaciones mundiales como la pandemia de la COVID-19. En términos más generales, la permanencia y la salud de los bosques y otros sistemas basados en árboles son fundamentales para crear resiliencia y seguir teniendo posibilidades de apoyar el bienestar humano.
Existen pruebas constatadas de que los bosques y otros sistemas basados en los árboles permiten a las personas pobres mejorar su bienestar y mitigar los riesgos, si bien apenas se ha documentado cómo les ayudan a salir de la pobreza de forma permanente. Las personas pobres no pueden aprovechar esta ayuda por completo debido a las dificultades a la hora de acceder al crédito, el transporte, los mercados, la protección social y otros servicios públicos, así como a otros obstáculos93,94, como la falta de derechos de tenencia. El acceso a las nuevas tecnologías puede marcar la diferencia: por ejemplo, la adopción de tecnología mejorada para la elaboración de la manteca de karité permitió a mujeres rurales de Ghana aumentar los ingresos de sus hogares95.
Aunque los dendrocombustibles y los PFNM desempeñan funciones esenciales en apoyo de los medios de vida, en particular por lo que hace a la seguridad alimentaria, los datos sobre estas funciones son escasos y la mejor manera de conocer su valor son las encuestas por hogares y las técnicas de valoración. Se han realizado encuestas socioeconómicas nacionales en el sector forestal96 en Armenia, Georgia, Liberia, Santo Tomé y Príncipe y Türkiye. En Türkiye, alrededor del 50% de los habitantes de pueblos forestales encuestados recolectaba productos vegetales no madereros como el escaramujo, piñas y hongos, y aproximadamente el 44% recogía plantas medicinales o aromáticas como el tomillo y la salvia real. En Liberia, una encuesta mostró que, en un período de 12 meses, el 70% de los hogares recolectaba productos forestales con fines de consumo o generación de ingresos (Recuadro 4). En Georgia, el 68% de los hogares utilizaba dendrocombustibles para cocinar, el 80% los empleaba para la calefacción y el 56%, para hervir agua. En Santo Tomé y Príncipe se observó que los hogares utilizaban los productos forestales u otros productos silvestres para atender las necesidades de alimentos durante los meses de inseguridad alimentaria: más del 90% señaló que esos productos eran importantes o muy importantes en sus estrategias de afrontamiento y el 75% de este subconjunto dependía principalmente de los productos forestales para superar la falta de alimentos. Una encuesta realizada en Bangladesh reveló que casi dos terceras partes de los hogares recolectaban productos forestales (Recuadro 5).
RECUADRO 4UNA ENCUESTA SOCIOECONÓMICA REALIZADA EN LIBERIA MUESTRA QUE LAS PERSONAS QUE VIVEN CERCA DE BOSQUES OBTIENEN BENEFICIOS CONSIDERABLES DE ELLOS
Casi la mitad (47,5%) de los hogares de Liberia vive en las proximidades o depende en gran medida de los bosques del país. El Gobierno de Liberia llevó a cabo una encuesta forestal nacional por hogares en la que participaron 3 000 hogares cercanos a bosques de 250 “distritos censales”, es decir, divisiones administrativas a efectos censales y para otras operaciones estadísticas. Las conclusiones principales son las siguientes (todas hacen referencia a 2018):
▸ Los hogares recolectaban, en promedio, más de 40 productos forestales. El 70% de los hogares recolectaba productos forestales para consumo propio o para consumo propio y venta. Los productos esenciales recolectados para generar liquidez e ingresos eran la leña, los postes, el ratán, la carne de caza y las hojas. Los ingresos derivados de los productos forestales representaban de media un 35% de los ingresos totales de los hogares.
▸ El 95% de los hogares encuestados dependía de los dendrocombustibles para la obtención de energía. Casi todos los hogares (98%) indicaron que recogían dendrocombustibles para uso propio.
▸ El 36% de los hogares utilizaba productos forestales para la construcción o el mantenimiento de la vivienda. Los tres productos forestales más empleados en la construcción eran los postes, las hojas y la madera, y su obtención de las tierras comunales se consideró “muy fácil”.
▸ Más del 50% de los hogares que requirieron asistencia médica durante los 12 meses anteriores utilizó plantas medicinales, y el 77% de ellos recolectó las plantas medicinales de las tierras comunales.
▸ Los encuestados señalaron que los bosques contribuían significativamente a la resiliencia: el 43% de los hogares utilizaba los productos forestales para recuperarse de perturbaciones económicas y naturales.
▸ Durante el período de referencia de la encuesta, el 46% de los hogares padecía inseguridad alimentaria y dos terceras partes de ellos dependían de los productos forestales para satisfacer sus necesidades; el período de inseguridad alimentaria duraba en promedio unos tres meses.
FUENTE: Banco Mundial. 2020. People and forests interface – Contribution of Liberia’s forests to household incomes, subsistence, and resilience. Disponible en inglés en: https://openknowledge.worldbank.org/handle/10986/34438.
RECUADRO 5LA IMPORTANCIA DE LOS ÁRBOLES FUERA DEL BOSQUE EN BANGLADESH
Según una encuesta nacional por hogares llevada a cabo por el Gobierno de Bangladesh, alrededor del 64% de la población nacional —esto es, 106 millones de personas—, que incluía al 65% de las mujeres del país, participa en la recolección de productos forestales. Los árboles fuera del bosque suministran el 98% de los productos que recolectan habitualmente los hogares, como madera, bambú, dendrocombustibles, hojas y frutos. Se estima que el valor nacional total de los productos primarios obtenidos de los árboles y los bosques en un período de 12 meses comprendido entre 2017 y 2018 ascendió a 8 540 millones de USD. Los hogares vendieron el 31% de los productos que recolectaron y generaron 81 USD por hogar al año en promedio.
FUENTE: Gobierno de Bangladesh. 2019. Tree and forest resources of Bangladesh – Report on the Bangladesh Forest Inventory. Dacca, Gobierno de la República Popular de Bangladesh.
Cuando la formulación de las políticas se basa en información biofísica y socioeconómica, se pueden obtener políticas eficaces con miras a crear un círculo virtuoso de restauración de los ecosistemas, desarrollo económico y reducción de la pobreza. En China, por ejemplo, al planificar las políticas de desarrollo económico se observó que las zonas afectadas por la pobreza coincidían en gran medida con zonas ecológicamente frágiles, por lo que se requerían políticas tanto de mitigación de la pobreza como de protección ecológica. Esto dio lugar a la adopción de un enfoque ecológico de mitigación de la pobreza, que consistía en combinar programas de mitigación de la pobreza y de protección ecológica en la misma región. Entre 2012 y 2020, China ejecutó más de 10 programas, que abarcaban desde la restauración y protección de los bosques hasta la creación de empleos verdes, el apoyo al sector forestal y el ecoturismo (Cuadro 3); en total, estos programas movilizaron más de 8 860 millones de USD anuales y ayudaron a más de 14 millones de personas al año a aumentar sus ingresos. Se han publicado políticas de mitigación de la pobreza ecológica desde 2010, principalmente para normalizar políticas y medidas específicas. En general, los gobiernos centrales y locales han elaborado y aplicado enfoques y mecanismos como las obras de ingeniería ecológica, la compensación ecológica, los empleos ecológicos centrados en el bienestar social, las industrias de carácter ecológico, la migración ecológica y la mitigación de la pobreza centrada en el sector forestal.
CUADRO 3PROGRAMAS QUE COMBINAN LA MITIGACIÓN DE LA POBREZA Y LA RESTAURACIÓN ECOLÓGICA EN CHINA, 2012-19

FUENTES: Los datos sobre la inversión en programas de desarrollo industrial y las oportunidades de empleo creadas por el ecoturismo forestal se han extraído del Anuario estadístico de China sobre bosques y pastizales correspondiente a 2012-18. El resto de los datos procede de un informe sobre reducción de la pobreza ecológica en el sector de los bosques y pastizales publicado por la Administración Nacional de Bosques y Pastizales de China en abril de 2021.