El pronóstico relativo a las existencias mundiales de cereales al cierre de las campañas actuales que terminan en el 2000 se ha rebajado ligeramente respecto al informe anterior a 332 millones de toneladas (Cuadro A.5). La información más reciente apunta a una disminución probablemente mayor de los remanentes de maíz en China y en algunos de los principales países exportadores. Según los pronósticos actuales, las existencias remanentes mundiales de cereales totalizarán 14 millones de toneladas, o sea un 4 por ciento menos que su nivel de apertura. Toda la disminución prevista se producirá en las existencias de trigo y cereales secundarios ya que los inventarios de arroz deberían aumentar por segundo año consecutivo. En conjunto, la relación entre los remanentes mundiales de cereales y la utilización tendencial en el 2000/01 se cifra en 17,4 por ciento, sin modificaciones respecto al informe anterior y dentro del margen de 17-18 por ciento que la Secretaría de la FAO considera el mínimo necesario para salvaguardar la seguridad alimentaria mundial. Además, la parte porcentual de las existencias mundiales de cereales que poseen los principales exportadores, otro indicador de la seguridad alimentaria mundial, debería mantenerse inalterada en torno al 45 por ciento.
Es probable que los inventarios mundiales de trigo para las campañas agrícolas que terminan en el 2000 disminuyan a 136 millones de toneladas, volumen inferior en 4 millones de toneladas, o sea el 3 por ciento, a su nivel de apertura. Esta merma es ligeramente inferior a la que se había indicado anteriormente, pero representaría todavía la primera en 4 años.
Entre los países cuyas existencias finales de este año probablemente disminuirán significativamente figuran China (3 millones de toneladas menos), Turquía (1,5 millones de toneladas menos), Siria (1 millón de toneladas menos), la Federación de Rusia (1 millón de toneladas menos), y la República Islámica del Irán (700 000 toneladas menos). En la mayoría de estos países, las disminuciones de las existencias se deberán a una mengua de la producción interna.
Los inventarios totales de trigo que poseen los principales países exportadores deberían mantenerse inalterados respecto a sus niveles relativamente altos de apertura, situándose en torno a los 51 millones de toneladas (Cuadro A.4). Sin embargo, ello sería principalmente a causa del aumento de los remanentes de los Estados Unidos, pronosticado en 1,4 millones de toneladas, respecto al año anterior. En cuanto a los otros principales exportadores, la disminución de la producción de la CE combinada con el aumento de sus exportaciones podría determinar una reducción de alrededor de unos 2 millones de toneladas de existencias. En el Canadá, pese a un aumento de la producción, es probable que las existencias finales se mantengan cercanas a sus niveles de apertura, a causa principalmente de un fuerte aumento de las exportaciones. Una producción récord de trigo en Australia podría traducirse en un aumento de las existencias de ese país, aunque también las exportaciones deberían aumentar de forma pronunciada.
El pronóstico relativo a las existencias de cereales secundarios para las campañas agrícolas que terminan en el 2000 se ha rebajado desde el último informe en 4 millones de toneladas a 137,5 millones de toneladas. En este nivel, las existencias mundiales de cereales secundarios disminuirían en 12 millones de toneladas, o sea el 8 por ciento, respecto de su nivel de apertura, lo que representa el volumen más reducido en 3 años. Las continuas y grandes exportaciones de maíz de China podrían dar lugar a una mengua de los remanentes, dada la disminución de su producción interna en 1999. La estimación de las existencias totales de cereales secundarios que poseen los cinco principales exportadores también se ha rebajado este mes a 77 millones de toneladas. El pronóstico relativo a las existencias finales de los Estados Unidos se ha rebajado en 3,7 millones de toneladas a 49,5 millones de toneladas. En este nivel, los inventarios de cereales secundarios de los Estados Unidos serían ligeramente inferiores a los del año pasado, debido a una mengua de la producción y a un incremento fuerte de la utilización interna de piensos. Otra mengua significativa de las existencias se prevé en la CE, donde la merma de la producción de 1999 debería redundar en una disminución de alrededor de 5 millones de toneladas en las existencias, principalmente de cebada.
Años agrícolas que finalizan en: | |||
1998 | 1999 estim. | 2000 pronóst. | |
(. . . millones de toneladas . . .) | |||
Trigo | 135,6 | 139,9 | 135,6 |
Cereales | |||
secundarios | 140,2 | 149,4 | 137,5 |
Arroz (elabor.) | 54,8 | 56,5 | 59,0 |
TOTAL | 330,6 | 345,8 | 332,1 |
del cual: | |||
Principales | |||
exportadores | 126,5 | 154,1 | 148,0 |
Otros países | 204,1 | 191,7 | 184,1 |
Se prevé que las existencias mundiales de arroz al cierre de las campañas comerciales que terminan en el 2000 aumentarán en alrededor de 2 millones de toneladas con respecto a su nivel de apertura, hasta alrededor de 59 millones de toneladas, el nivel más alto desde 1994. El aumento se atribuye principalmente a las excelentes cosechas obtenidas durante la campaña 1999/2000, cuya producción total ha superado el crecimiento del consumo. La mayor parte de la reposición de existencias se concentrará en los grandes países exportadores, particularmente Tailandia, Viet Nam, los Estados Unidos y la India. También los países importadores, tales como Indonesia, Bangladesh, Filipinas y el Brasil podrían aprovechar la debilidad general de los precios del arroz para reponer sus existencias.
En base a los pronósticos provisionales actuales relativos a la producción de cereales para el 2000 y a las proyecciones sobre el nivel de la utilización en el 2000/01, las informaciones iniciales sobre las existencias mundiales de cereales al cierre de las campañas agrícolas que terminan en el 2001 apuntan a una ulterior disminución de al menos 8 millones de toneladas, o sea el 2 por ciento, respecto a este año, para situarse en torno a los 324 millones de toneladas. La mayor parte de la disminución debería producirse en el Norte de Africa y en Asia, especialmente en China. También podrían disminuir las existencias totales de los principales países exportadores, aunque ligeramente. En cuanto a los cereales tomados individualmente, se prevé una contracción de las existencias de trigo y arroz, pero las de cereales secundarios podrían crecer algo.