Las relaciones entre la sociedad y la tierra se han ido transformando progresivamente como consecuencia de los cambios espectaculares registrados a lo largo del siglo XX, sobre todo como consecuencia de la creciente industrialización, la mecanización de la agricultura, el carácter inmediato de la comunicación y el comercio mundial, el rápido crecimiento del número y densidad de la población y la utilización creciente de biotecnologías. Las perspectivas nacionales, regionales e internacionales sobre la agricultura deben examinar estos y otros factores con el fin de sentar unas bases lo más sólidas posible para la asignación de los recursos, el establecimiento de normas, la formulación de políticas y la toma de decisiones. La nueva impresión de que la agricultura contribuye en formas numerosas y diversas a los objetivos de la sociedad obliga a buscar una mejor comprensión de las "múltiples funciones de la agricultura". Otras actividades económicas tienen fuertes relaciones con la utilización de la tierra, pero la agricultura tiene también dimensiones sociales y ambientales singulares
La función primera y primordial de la agricultura continúa siendo la seguridad alimentaria, definida por la FAO como una situación en que "todas las personas tienen en todo momento acceso físico y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades alimenticias y sus preferencias en cuanto a los alimentos a fin de llevar una vida activa y sana". En la Cubre Mundial sobre la Alimentación, de 1996, se hizo hincapié en la necesidad de considerar el acceso a alimentos suficientes y adecuados como un derecho humano universal. Sin duda ninguna, la disponibilidad permanente, la fiabilidad de los suministros, una autonomía relativa, el acceso de la población y la equidad constituyen todas ellas cuestiones fundamentales.
Además de alimentos, la agricultura produce también una gran variedad de bienes y servicios no alimentarios, influye en el medio ambiente, afecta a los sistemas sociales y culturales y contribuye al crecimiento económico. Todas estas funciones de la agricultura pueden ayudar al logro del desarrollo sostenible.
Pero la agricultura presenta también importantes desafíos para el desarrollo sostenible, entre los que destacan los siguientes:
La FAO y otras instituciones han centrado su atención durante los años setenta y ochenta en la evolución reciente de la agricultura que podrían resolver las preocupaciones existentes sobre la seguridad alimentaria, la productividad y la sostenibilidad en el futuro. Esta reflexión se cristalizó en el concepto de "agricultura y desarrollo rural sostenibles (ADRS)", cuyas principales características son que "este desarrollo sostenible (en los sectores agrícola, forestal y pesquero) conserva la tierra, el agua y los recursos genéticos vegetales y animales, no degrada el medio ambiente y es técnicamente apropiado, económicamente viable y socialmente aceptable". Entre los logros más importantes cabe citar su contribución a mejorar la información, tecnología y organización en las explotaciones, así como una mejor compresión de los vínculos existentes entre las zonas rurales y las fuerzas institucionales y comerciales externas.
El concepto de carácter multifuncional de la agricultura y la tierra (CMFAT), derivado del de ADRS, comprende toda la gama de funciones ambientales, económicas y sociales de la agricultura. El concepto abarca los múltiples bienes y servicios generados por la agricultura y la correspondiente utilización de la tierra. El análisis del carácter multifuncional de la agricultura permite una mejor comprensión de la combinación de posibles sinergias y soluciones de compromiso necesarios para lograr la sostenibilidad en la agricultura y el desarrollo rural.
El concepto de funciones múltiples recoge la complejidad, alcance e importancia de esta gran variedad de interrelaciones e interacciones entre el sector agrícola (que en este contexto incluye también la silvicultura y la piscicultura) y las esferas del medio ambiente, la economía y la sociedad, lo cual ayuda a describir y entender las múltiples y, en muchos casos, complejas funciones de la agricultura. Un análisis mutifuncional puede facilitar una descripción de la situación actual e información suficiente para determinar los probables efectos de medidas concretas. Por ello, este planteamiento puede ilustrar el debate sobre cuestiones fundamentales como el comercio, la seguridad alimentaria, la biodiversidad y el empleo rural, y ayudar a identificar posibles sinergias y soluciones de compromiso y formular mejores políticas para conseguir el objetivo último de la sostenibilidad en la agricultura con la base de recursos correspondiente.
En este documento se analizan los conceptos, problemas y políticas en relación con el CMFAT. Junto con el documento de análisis correspondiente y seis documentos de antecedentes, el presente estudio constituye la principal aportación a la Conferencia FAO/Países Bajos sobre el carácter multifuncional de la agricultura y la tierra, que se celebrará en Maastricht (Países Bajos) del 12 al 17 de septiembre de 1999. Se prevé que la Conferencia representará una aportación al octavo período de sesiones de la Comisión sobre el Desarrollo Sostenible (CSD) de las Naciones Unidas (CSD-8), que tendrá lugar en abril del año 2000, para lo cual evaluará los progresos realizados en forma de estudios de casos concretos de iniciativas coronadas por el éxito, factores coadyuvantes, prácticas óptimas y enseñanzas aprendidas, y permitirá determinar cuál es la mejor manera de continuar el progreso hacia la aplicación del Programa 21 a escala mundial en el próximo siglo.
El objetivo global de la Conferencia es identificar las nuevas prácticas y los entornos propicios necesarios que darán lugar a una mayor sostenibilidad agrícola. Su atención se centrará especialmente en lograr una mayor sensibilidad internacional, nacional y local acerca de la amplitud, diversidad y posibilidades de las múltiples contribuciones que la agricultura y el uso correspondiente de la tierra pueden representar tanto para la seguridad alimentaria como para la sostenibilidad en sentido amplio.
Las principales tareas de la Conferencia son las siguientes:
El contexto de la Conferencia y de esta serie de documentos conexos se resume en el recuadro siguiente.
RECUADRO 1: DECLARACIÓN DE RÍO SOBRE EL MEDIO AMBIENTE Y EL DESARROLLO Principio 3 El derecho al desarrollo debe ejercerse en forma tal que responda equitativamente a las necesidades de desarrollo y ambientales de las generaciones presentes y futuras. Principio 4 A fin de alcanzar el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente deberá constituir parte integrante del proceso de desarrollo y no podrá considerarse en forma aislada. Principio 5 Todos los Estados y todas las personas deberán cooperar en la tarea esencial de erradicar la pobreza como requisito indispensable del desarrollo sostenible, a fin de reducir las disparidades en los niveles de vida y responder mejor a las necesidades de la mayoría de los pueblos del mundo. Principio 8 Para alcanzar el desarrollo sostenible y una mejor calidad de vida para todas las personas, los Estados deberían reducir y eliminar las modalidades de producción y consumo insostenibles y fomentar las políticas demográficas apropiadas. |
RECUADRO 2: DECLARACIÓN DE ROMA SOBRE LA SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL. "Convencidos de que el carácter polifacético de la seguridad alimentaria hace necesaria una acción nacional concertada, junto con iniciativas internacionales eficaces para complementar y reforzar la acción nacional, asumimos los siguientes compromisos: garantizaremos un entorno político, social y económico propicio, destinado a crear las mejores condiciones posibles para la erradicación de la pobreza y para la paz duradera, sobre la base de una participación plena y equitativa de las mujeres y los hombres, que favorezca al máximo la consecución de una seguridad alimentaria sostenible para todos; aplicaremos políticas que tengan por objeto erradicar la pobreza y la desigualdad y mejorar el acceso físico y económico de todos en todo momento a alimentos suficientes, nutricionalmente adecuados e inocuos, y su utilización efectiva; nos esforzaremos por adoptar políticas y prácticas participativas y sostenibles de desarrollo alimentario, agrícola, pesquero, forestal y rural, en zonas de alto y bajo potencial, que sean fundamentales para asegurar un suministro de alimentos suficiente y fiable a nivel familiar, nacional, regional y mundial y que combatan las plagas, la sequía y la desertificación, considerando las múltiples funciones de la agricultura; nos esforzaremos por asegurar que las políticas de comercio alimentario y agrícola y de comercio en general contribuyan a fomentar la seguridad alimentaria para todos a través de un sistema de comercio mundial leal y orientado al mercado; nos esforzaremos por prevenir y estar preparados para afrontar las catástrofes naturales y emergencias de origen humano, y por atender las necesidades transitorias y urgentes de alimentos de maneras que fomenten la recuperación, la rehabilitación, el desarrollo y la capacidad para satisfacer las necesidades futuras; promoveremos la asignación y utilización óptimas de las inversiones públicas y privadas para impulsar los recursos humanos, los sistemas alimentarios, agrícolas, pesqueros y forestales sostenibles y el desarrollo rural en zonas de alto y de bajo potencial; aplicaremos, vigilaremos y daremos seguimiento a este Plan de Acción a todos los niveles en cooperación con la comunidad internacional. Nos comprometemos a adoptar las medidas y prestar el apoyo necesarios para aplicar el Plan de Acción de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación. " |
En el siguiente capítulo se describe el concepto de CMFAT y sus orígenes, y se señalan las principales relaciones e interacciones entre la agricultura y la correspondiente utilización de la tierra, por un lado, y las esferas ambientales, económicas, sociales y culturales, por el otro, destacando tanto los beneficios como los problemas existentes. En el Capítulo 3 se analizan las conclusiones de la serie de estudios de casos en el documento de análisis y se utilizan éstos para ilustrar características particulares del concepto multifuncional de la agricultura. Luego sigue un capítulo en el que se describe el marco teórico que determina la compleja serie de relaciones e interacciones en lo que se refiere a las dimensiones geográficas -como la ubicación del potencial agrícola y su capacidad de recuperación-, y las dimensiones institucionales -como los niveles de desarrollo de los mercados, las instituciones y la capacidad pública. El capítulo final trata de perfilar el camino futuro, en particular las acciones, colaboraciones y asociaciones necesarias para hacer realidad la posible contribución del CMFAT y otros conceptos afines al logro de la sostenibilidad.
En conjunto, el documento expositivo y el de análisis representan un examen amplio, integrado y temáticamente coherente de las cuestiones relacionadas con el CMFAT, que serán de utilidad para las autoridades, técnicos, profesionales y otras partes interesadas. El análisis trata de ilustrar y orientar, pero no imponer, las políticas y acciones nacionales e internacionales.
Las referencias aparecen como notas a pie de página, y se enumeran al final del documento.