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"Internet ya está haciendo avances espectaculares en los países en desarrollo. Africa está tratando de romper su aislamiento científico y comercial. No obstante la mediocre calidad de sus redes de telecomunicaciones públicas, Africa trata de aprovechar, de la mejor manera, las nuevas tecnologías. A finales de 1996, sólo cinco o seis países africanos carecerán de conexión con Internet. La conferencia llegó a la conclusión de que lejos de ser inapropiada para los países en desarrollo, la red se adapta bien a estos. Sus costos son bajos: todo lo que se necesita es un computador personal, un modem y una conexión telefónica común y corriente. Además, la existencia de la propiedad colectiva en muchos países en desarrollo así como el uso corriente del teléfono significa que sólo se requiere una pequeña inversión para conectarse a la red. "
Conferencia Interparlamentaria sobre Educación, Ciencia,
Cultura y Comunicación en el umbral del siglo 21, París, 3-6 junio 1996.
Invertir en el desarrollo requieren de cierta visión. Las iniciativas de desarrollo que requieren tecnología a veces pierden de vista la dimensión humana del desarrollo. La meta de un enfoque integrado, destinado a mejorar el servicio de Internet para el desarrollo rural y agrícola, es permitir que la población rural potencie los recursos que la comunidad necesita para mejorar sus condiciones de vida. Las redes de comunicación que permiten la transmisión de información hacia y desde las comunidades rurales y las asociaciones agrícolas, así como en y entre las distintas organizaciones intermediarias que atienden directa o indirectamente a las comunidades rurales y a los agricultores, ayudará a fortalecer los recursos de la comunidad. Se requiere, entonces, de una visión que incluya a todos los actores involucrados en el desarrollo rural y agrícola, en una dinámica de comunicación entre ellos, así como con las organizaciones rurales, es decir que la gente en el agro tenga acceso a los mismos instrumentos y recursos de información a que tienen acceso sus pares urbanos.
Internet se ajusta bien a esta visión. Internet es un medio de comunicación y es probablemente el medio más flexible de que se dispone actualmente. Su potencial le permite integrarse a una amplia variedad de proyectos que tienen objetivos tales como la participación la capacitación, la educación, la investigación (especialmente la investigación participativa), el apoyo técnico y el fortalecimiento institucional. Se trata de un instrumento que puede ser valioso para el desarrollo rural y agrícola integrado. Siempre que un proyecto involucra a gente que necesita comunicar y compartir información por encima de los límites geográficos, entre grupos sociales diferentes, entre diversas organizaciones y sistemas de producción, es necesario crear sistemas de comunicación flexibles. Los proyectos que pueden aplicar Internet van desde los que se dedican a la capacitación para la agricultura, hasta los que trabajan con la forestería comunitaria o la medicina veterinaria.
Internet es un instrumento de usos múltiples que fundamentalmente permite a la gente trabajar junta y aprender unos de otros. Los resultados de los proyectos que se sirven de Internet no son técnicos sino humanos y sociales. Internet es esencialmente un instrumento que mejora las relaciones humanas. Los proyectos no necesitan ser impulsados por intereses técnicos sino por el conocimiento humano, la comunicación y las relaciones sociales. Por lo tanto, los resultados que se proponga un proyecto realizado a través de Internet deben estar directamente ligados a mejorar las relaciones sociales, a hacer posible el acceso a conocimientos y compartirlos, así como a mejorar la comunicación entre la gente y las organizaciones. Dichas metas se pueden alcanzar a través de los esfuerzos destinados a mejorar los recursos de las comunidades rurales y de los resultados del proyecto, según las circunstancias locales, como:
Cuando se consideran los resultados a obtener en el proyecto, la interrogante no es simplemente "¿Cómo se puede proporcionar el acceso a Internet y a la infraestructura?" La pregunta es: "¿Cómo podemos usar este medio para ayudar a la gente a encontrar sus objectivos de información y comunicación en función de sus metas de desarrollo?' Mejorar la información rural comunitaria y los recursos de comunicación son objetivos ligados a los esfuerzos que apunten a mejorarla capacidad de las organizaciones y de la población rural para que utilicen esos recursos de la manera más efectiva y sostenible. La iniciativa de Internet dirigida al desarrollo rural y agrícola requiere cierta cautela. Las diferentes regiones, organizaciones y comunidades tendrán distintas necesidades en cuanto a su aplicación, al fortalecimieto institucional y a la tecnología (por ej.: los casos de Chile y México.) En otras áreas, el reto será el fortalecimiento de las organizaciones intermediarias de las oficinas de extensión en el campo, las ONGs rurales, las escuelas rurales, bibliotecas rurales, centros de salud, oficinas descentralizadas gubernamentales, organizaciones de la iglesia; en otros casos, será el establecimiento de centros de información comunitaria conectados a Internet. En todos los casos, será importante conectar las actividades de Internet con los medios locales y las metodologías y modelos de comunicación existentes.
Cada iniciativa tendrá sus propias características debido a la particularidad de la comunidad local involucrada y su respectivo acervo social, cultural y económico.
Será necesario dedicar particular atención a la participación de las mujeres en estas actividades. En general, la mayoría de los usuarios de Internet son hombres. Las encuestas norteamericanas señalan una relación que oscila entre 3, 4 usuarios hombres a 1 usuario mujer, en esa región. Esta situación parece estar mejorando paulatinamente, sin embargo, es necesario hacer esfuerzos específicos para garantizar que las mujeres tengan la oportunidad de participar desde el principio en las iniciativas de Internet para el desarrollo rural y agrícola. Una de las motivaciones de esta recomendación corresponde a la necesidad de garantizar la equidad de género. Otra de las evidencias a este respecto sugiere que las mujeres pueden desempeñar un rol asegurando que los servicios de Internet orientados a la comunidad se mantengan enfocados hacia sus necesidades y que no se conviertan en una veleidad tecnológica. (Richardson, 1995)
"la comunicación para el desarrollo basada en la participación activa de las personas valora más al proceso que al producto. En el vídeo participativo, el proceso de comunicación es mucho más importante que el maldito vídeo"
Tony Williamson, pionero canadiense de la comunicación para el desarrollo (comunicación personal).
La FAO cuenta con una experiencia de 25 años en el campo de la comunicación para el desarrollo rural y agrícola (FAO 1989, 1990a, 1990b, 1994, 1995a, 1995b, 1996a, 1996b). Esta experiencia la aplica a través de medios como la radio rural, el vídeo de formato doméstico, la fotografía y el material impreso junto con Internet, en tres iniciativas piloto. Una estrategia simple, basada en el sentido común de hacer que la gente participe en la evaluación de sus propias necesidades de conocimiento y comunicación, es la piedra angular de las metodologías de comunicación para el desarrollo. Esta estrategia resulta esencial para alcanzar los resultados mencionados anteriormente.
Buena parte del histórico éxito de la FAO en los enfoques de comunicación para el desarrollo está basado en el uso de medios que muchos. planificadores del desarrollo consideraban demasiado sofisticados o "tecnología inapropiada". Este medio es el vídeo de formato doméstico (camescopios o cámaras de vídeo corrientes y monitores de televisión portátiles). Los facilitadores usan vídeos de formato doméstico para transmitir conocimientos a los miembros de las comunidades rurales, y para permitirles construir, articular sus ideas, sus aspiraciones, sus necesidades y resolver sus problemas de manera participativa. Por otro lado, la utilización del vídeo también puede ser aplicada para hablar directamente a los investigadores, a quienes toman las decisiones y se encuentran distantes, así como para compartir sus experiencias con otros superando las distancias. En el trabajo específico de la "comunicación participativa ", el proceso de comunicación es más importante que la producción del vídeo en sí. La importancia del proceso es a menudo mal interpretado por los observadores de los proyectos de comunicación para el desarrollo.
Para los participantes no es importante convertirse en profesionales de la comunicación: la meta es proporcionar medios flexibles para transmitir conocimientos, que permitan a la gente compartir el mismo. Este enfoque de comunicación para el desarrollo, integrado a las actividades de planificación del mismo, garantiza a los agricultores y a los habitantes rurales una participación activa en los procesos de desarrollo. Este tipo de enfoque permite a los actores rurales articular sus conocimientos, organizar actividades locales, participar en la toma de decisiones y reconocer ampliamente el valor que conlleva compartir sus propias ideas.
Al igual que en los procesos de vídeo participativo, Internet puede ayudar a la gente a alcanzar sus metas de desarrollo, pero esta red debe ser utilizada como una herramienta en los procesos de comunicación y no simplemente como "tecnología estática". De lo contrario, los equipos de Internet estarán relegados junto amontones de desechos de tecnología inapropiada de desarrollo o descartada debido a los intentos fallidos de hacer de ella un medio útil y oportuno a nivel local. Si, por ejemplo, los resultados de la información derivados de sistemas de información electrónica altamente técnicos, tales como los sistemas de alerta temprana sobre el hambre, o los bancos de datos de seguridad alimentaria no son puestos a disposición de la gente cuyas vidas son el tema de esos sistemas, se está fallando en la utilización de una inversión grande en estas infraestructuras. Asímismo se está fallando en asesorar a la gente en la toma de decisiones apropiadas basadas en tan valiosa información. Antes de crear estos instrumentos, es necesario involucrar a los beneficiarios mismos en la identificación y evaluación de tales iniciativas, así como discutir con ellos la planificación para el uso de estos instrumentos.
Hay que evitar hacer más profunda la brecha existente entre quienes tienen la información: expertos, académicos, investigadores, planificadores de políticas etc. y quienes no tienen información, por lo general los beneficiarios de las actividades de desarrollo. En efecto, esta brecha puede aumentar cuando se crean las aplicaciones de Internet orientadas sólo a la utilización por parte de los investigadores o burócratas. Una revisión de los proyectos de Internet africana y las propuestas del proyecto de Internet archivado en el Secretariado de Bellanet revelará a cualquier parte interesada que sólo un puñado de las varias docenas de proyectos (algunos en vías de financiación y otros en fase de análisis) van más allá de la simple entrega de servicios a los investigadores y burócratas. Pocos proyectos ponen en evidencia la participación de los beneficiarios últimos. Una exigua minoría, por ej: el Proyecto Acacia del Centro de Investigación para el Desarrollo Internacional, (CIID involucran a organizaciones de base.
Es necesario encontrar un modelo que permita llevar (tanto desde el punto de vista geográfico como social) el conocimiento producido por investigadores y planificadores de políticas a los productores de conocimiento menos reconocidos, como la gente misma que se beneficia de los programas de desarrollo. (Ver Biblioteca Virtual de Estudios Indígenas) Internet ayuda a hacer esto posible. Gracias a Internet, los agricultores pueden y tienen acceso a la misma información, y a muchos de los instrumentos de divulgación, información y publicaciones de que disponen los investigadores de las principales universidades y centros de investigación. Es necesario garantizar que los proyectos de Internet sean planificados conjuntamente con y para los beneficiarios mismos de los programas de desarrollo.
Un hecho conocido por muchos de los usuarios actuales de Internet es que esta red tiene el poder de atravesar distancias sociales y geográficas y ayudar a la gente a encontrar nuevas maneras de facilitar el flujo de información y conocimiento. De distintas maneras, Internet ha sido siempre un instrumento de comunicación para el desarrollo. Dentro de las organizaciones burocráticas Internet tiene maneras de equilibrar las jerarquías, facilitando nuevos modelos de comunicación y contribuyendo a hacer posibles actividades que de otra manera no podrían ocurrir (Negroponte, 1995). Este factor lo convierte en un medio particularmente atractivo dentro de los esfuerzos de comunicación para el desarrollo. La clave para alcanzar resultados similares en nuevos proyectos de desarrollo e Internet es comenzar con un enfoque de comunicación para el desarrollo que parta desde la base y que incluya a los beneficiarios durante el proceso de planificación.
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