Perspectivas alimentarias
Sistema mundial de información
y alerta
No. 5/6, 1997 - Roma, mayo/junio 1997
En 1997 se prevé otra buena cosecha de cereales. Si se realizan los pronósticos actua-les, la producción de cereales de 1997 sería suficiente para atender las necesidades de consumo previstas en 1997/98 y permitir otra moderada reposición de las reservas de ce-reales. Ello no obstante, puede que la relación entre las existencias mundiales y la utili-zación sólo se acerque al 16 por ciento, valor inferior a los niveles mínimos de seguridad.
Persisten emergencias alimentarias en 29 países de todo el mundo, principalmente en Africa. Siguen presentándose graves dificultades en la región de los Grandes Lagos y en el Cuerno de Africa debido a los disturbios civiles, el gran desplazamiento de la población y la merma de las cosechas. En Asia, está surgiendo un problema alimentario grave en la República Democrática Popular de Corea. En la CEI, la situación alimentaria está empeorando en Tayikistán, y aumentan los casos de malnutrición aguda.
El último pronóstico de la FAO cifra la producción de cereales de 1997 en 1 887 millones de toneladas, volumen cercano a la producción récord de 1996 y superior a la tendencia por segundo año consecutivo. Si las condiciones siguen siendo favorables hasta la cosecha, se pronostica que la producción de trigo será de 583 millones de toneladas y la de cereales secundarios totalizará 926 millones de toneladas, mientras que, según pronósticos provisionales, la de arroz se mantendrá prácticamente sin variaciones respecto al nivel de alrededor de 377 millones de toneladas del año anterior.
El primer pronóstico de la FAO relativo a las importaciones mundiales de cereales en 1997/98 es de 197 millones de toneladas, 4 millones de toneladas más que el volumen estimado el año anterior. La mayor parte del aumento debería de registrarse en las importaciones de trigo que, según los pronósticos, crecerán en un 3 por ciento hasta alcanzar los 93 millones de toneladas, mientras que se prevé un incremento sólo marginal de las importaciones de cereales secundarios.
Los precios de exportación del trigo han bajado tras el alza registrada a finales de abril, pero siguen sensibles a los cambios que pudieran producirse en las perspectivas de las cosechas de 1997. En general, los precios medios son aproximadamente un 30 por ciento inferiores a los del año pasado. Los del maíz se han ido debilitando constantemente en las últimas semanas debido a una falta de demanda de importaciones, y ahora son in-feriores en un 40 por ciento a los del año pasado. Los del arroz se fortalecieron en mayo, aunque, como en el caso de otros cereales, están por debajo del nivel del año pasado.
El consumo de semillas oleaginosas ha aumentado más que la producción en 1996/97, y se prevé que se tendrá que recurrir a las reservas. Debido a la escasez de su-ministros, los precios se mantienen relativamente altos. Los primeros pronósticos indican que la situación mejorará algo en 1997/98 gracias al aumento de la producción y a una reposición parcial de las existencias.
La FAO calcula la producción mundial de azúcar de 1996/97 en 122,5 millones de toneladas, volumen ligeramente inferior a la producción récord de 1995/96. Aunque se pronostica que en 1996/97 el consumo aumentará en más del 2 por ciento a 120,6 millo-nes de toneladas, habrá nuevamente un superávit de producción. Lo que, unido a la rela-ción ya alta entre las existencias y el consumo, debería mantener a corto plazo los precios bajo presión.