Farhana Haque Rahman realizó esta entrevista para Unasylva, en julio de 1985, en Bangladesh. En la actualidad es periodista independiente con residencia en Roma, y ha sido la principal lectora y comentadora de noticias de lengua inglesa para la radio y televisión de Bangladesh.
· Bangladesh tiene una superficie de unos 134 000 km2, de los cuales aproximadamente el 1 0% está sometido a alguna forma de ordenación por el Departamento de Montes. Otro 6,7% son montes del Estado no clasificados, o bosques khas de propiedad del Gobierno. Los bosques que se encuentran bajo el control del Departamento de Montes son de tres tipos: los bosques de montaña, compuestos de especies tropicales de hoja perenne y semiperenne; los bosques de Sundarban, formados por manglares en las marismas y bosques de sal en el interior, y, finalmente, pequeñas parcelas de sal rodeadas de fincas agrícolas.
Los bosques aportan el 2% del PNB y el 72% del consumo energético del país. Aproximadamente el 80% de todos los productos forestales se utilizan como combustible y entre el 50 y el 70% de esos productos provienen de parcelas forestales de las fincas en las aldeas.
En la partición de 1947, la región que actualmente es Bangladesh heredó lo que se ha descrito como «los bosques más abandonados del subcontinente». Sólo existían de 4 000 a 4 800 hectáreas de plantaciones, principalmente de teca; en 1982 había 160 000 hectáreas, y se había proyectado establecer otras 160000 en el segundo plan quinquenal (1979-1984).
Orgánicamente, el Departamento de Montes de Bangladesh depende del Ministerio del Interior y de la Secretaria de la División de Agricultura y Montes. El Departamento está dirigido por el Conservador Jefe de Montes; tiene una plantilla de 275 profesionales y más de 4 000 paraprofesionales.
Unasylva: Bangladesh acaba de iniciar su tercer plan quinquenal para los años 1985 a 1990. ¿Cuáles son las metas y los objetivos principales en el sector forestal?
S.A. Mahmoud: Nuestras tareas se centran sobre todo en los programas de aforestación en el medio rural, aunque continuarán nuestros esfuerzos para la ordenación de los bosques convencionales e industriales. En Bangladesh, aproximadamente el 80% de los recursos forestales totales - madera de construcción, leña y otra biomasa proviene ahora de arboledas de las fincas y de bosques rurales, y el 20% restante de bosques convencionales. Sin embargo, se ha registrado un agotamiento muy grave de los recursos forestales rurales debido a la demanda de leña y de materiales de construcción, y a la presión existente a nivel de las explotaciones agrícolas.
I. GEPEDA
Es preciso tener presente que Bangladesh es uno de los países más densamente poblados del mundo. En el Bangladesh rural de la pasada generación, sólo había una familia en cada explotación agrícola; ahora media docena de familias viven juntas en una sola. Debido a esa presión, los árboles y otras especies forestales se han agotado. Estamos observando que en la mayor parte de las zonas, especialmente en Bangladesh septentrional y en el distrito de Rajshahi, se han venido a crear condiciones casi semídesérticas. Ello afecta a la disponibilidad de agua en el suelo y está produciendo un cambio en todo el ecosistema.
¿Puede permitirse Bangladesh reservar para bosques algunas tierras adecuadas para la agricultura?
No, no lo creo. Los bosques no pueden competir con ningún tipo de cultivo agrícola, porque la tierra es un recurso sumamente escaso.
Estando la tierra tan solicitada, ¿cuáles son las perspectivas para aumentar las superficies forestales?
En primer lugar disponemos de una gran superficie de tierras a lo largo de carreteras y ribazos que normalmente no se utiliza para fines agrícolas. Ello ofrece condiciones aún más propicias para la repoblación que las existentes en las fincas agrícolas. La cuestión es seleccionar ciertas especies capaces de prosperar y de las cuales la población pueda obtener beneficios directos.
Además, hay algunos enclaves de tierras khas del Gobierno, que no se utilizan para la agricultura. En ellas podemos desarrollar proyectos similares a los de la silvicultura comunitaria. Estamos preparando un mecanismo mediante el cual se compartirán los beneficios con la comunidad local que cuidará los bosques una vez establecidos. Hay cierto margen para una considerable expansión de la silvicultura sin perjudicar a la producción agrícola.
¿Hasta qué punto representa un problema la intrusión en las reservas forestales, y qué medidas se han adoptado para minimizarlo?
La intrusión en las reservas forestales es un problema desde hace mucho tiempo. De hecho, durante el período pakistaní, cuando el General Azam Khan era Gobernador, se estableció una comisión de investigación, de la que yo era miembro, para analizar el problema de la intrusión. El sistema de la ordenación convencional, que habíamos adoptado del sistema británico, había quedado anticuado y no lo habíamos modificado para orientarlo más hacia la población. Teníamos un sistema rígido de normas que no permitían a la población el aprovechamiento de las tierras forestales, y ello daba lugar al fenómeno de la intrusión. Sin embargo, es bastante posible minimizar ese conflicto seleccionando las especies apropiadas y permitiendo cultivos intercalados en las tierras forestales. Pueden establecerse cultivos alimentarios o comerciales, siempre que los habitantes obtengan permiso para hacerlo sin causar daños en los bosques. Pero entonces este tipo de planteamiento ni siquiera se previó.
PREPARANDO LEÑA PARA LA VENTA mucha población y pocos bosques (CHRISTENSEN)
En la actualidad, estamos tratando de cambiar la situación y de conseguir que incluso los bosques ordinarios estén más al servicio de la población. Por ejemplo, hay un gran número de agricultores que, debido a la gran densidad de población, se desplazan hacia las zonas forestales. Si tratamos de expulsarlos, crearemos un problema humano. Pero si los insertamos en el sistema forestal, si les damos empleo en nuestros programas forestales y les permitimos el aprovechamiento alternativo de las tierras forestales, tendrán más interés en conservar bosques que en destruirlos.
La pérdida de recursos forestales debido a desastres naturales, a la erosión del suelo y al mal uso de las tierras por el hombre son motivo de preocupación en todo el mundo. ¿Cuáles son los principales factores del agotamiento de los bosques en Bangladesh, y en qué medida pueden controlarse o corregirse?
El factor más importante es la destrucción indiscriminada a que da lugar la explotación. En este caso, es también responsable el sistema que habíamos seguido en el pasado. Antiguamente, un lote forestal se subastaba a una persona rica que empleaba mano de obra asalariada, sobre todo pobres locales, para obtener el mayor beneficio posible de su inversión. Esas personas han sido responsables de gran parte del agotamiento de los bosques mediante diversas prácticas de corrupción. Los lotes forestales ya no se subastan de esa forma.
Otro factor importante ha sido la agricultura migratoria del tipo de corta y quema, que se practica en algunas zonas montañosas de Chittagong. Se trata de una de nuestras principales masas forestales, de más de 2 000 km2. En esta región, los bosques se dividieron en dos clases: convencionales o «reservas» dependientes directamente del Departamento de Montes, y el resto la mayoría - bosques del Estado no clasificados, donde no se había emprendido un programa de plantación durante el periodo británico o más tarde. La población tribal ha venido practicando la agricultura migratoria en estos bosques del
Estado no clasificados y, debido a una falta de ordenación apropiada, las laderas han quedado rasas, al no haberse hecho nuevas plantaciones. El resultado es una grave erosión del suelo que ha dado lugar a problemas de mantenimiento, incluso en el puerto de Chittagong.
¿Qué medidas se están adoptando actualmente?
Antes, de conformidad con el Hill Tracts Manual (Manual de zonas montañosas), no se reconocía nunca el titulo sobre tierras en bosques del Estado no clasificados. En consecuencia, los particulares no efectuaban inversiones a largo plazo en cultivos hortícolas. El sistema de tenencia de tierras ha cambiado ahora; se están creando títulos sobre las tierras, que se entregan a las familias, junto con un apoyo financiero y tecnológico.
Una de las recomendaciones del segundo plan quinquenal era la sustitución en los bosques del interior de la especie sal, de crecimiento lento, con especies para leña de crecimiento rápido. ¿En qué medida se ha logrado ese objetivo, y cuáles han sido los principales factores que han influido, positiva o negativamente, en su realización?
Esta es una cuestión muy compleja. A veces, tendemos a aceptar ciertas recomendaciones de expertos extranjeros que no están plenamente familiarizados con nuestra situación. Los bosques de sal constituyen la cubierta forestal natural de las zonas de arcilla de Dhaka y Mymensingh, y antes cubrían también las colinas de Lalmai (distrito de Comilla), y la zona de Barin en Bengala septentrional. En esas zonas, el riesgo de incendios forestales es muy alto. Aunque los expertos extranjeros recomendaron que iniciáramos en ellas plantaciones de eucalipto, yo personalmente, como Secretario de la División de Agricultura y Montes, me he opuesto. Los bosques de eucaliptos entrañarían un enorme peligro de incendio, pues el eucalipto es una especie muy resinosa. La inversión seria arriesgada y pondría en peligro otras efectuadas en la región.
Esta es mi primera objeción. La segunda es que el eucalipto produce un gran descenso del nivel de humedad del subsuelo. En consecuencia, no se puede cultivar nada debajo de los árboles, por lo que no existe la posibilidad de realizar actividades de agrosilvicultura. El sal es un árbol que produce excelente madera, por lo que no podemos descartarlo. Así, pues, estamos tratando de regenerar el sal junto con una combinación de árboles madereros de rápido crecimiento. El eucalipto se utilizará, pero no de manera exclusiva.
¿Qué resultado han tenido los esfuerzos para educar a la población rural sobre la importancia de los bosques y de unas prácticas forestales apropiadas?
En muchas zonas, el resultado ha sido bastante positivo. En los proyectos forestales comunitarios de algunos distritos del noroeste, donde las condiciones son semidesérticas, la cooperación de la población ha sido buena. Pero no se trata sólo de intentar motivar a la población. Como los habitantes de Bangladesh son pobres, están especialmente interesados en ver qué beneficios inmediatos y a largo plazo pueden obtener de las actividades forestales en su región.
PLANTACIONES DE PIÑA EN LAS COLINAS DE BANGLADESH toda la tierra posible para alimentos (FAO)
Los bosques cubren aproximadamente el 70% del consumo energético actual de Bangladesh. Teniendo en cuenta los recursos forestales limitados del país, ¿qué se está haciendo para desarrollar fuentes alternativas de energía?
La persona apropiada para dar una respuesta completa a esta pregunta seria el Secretario de la División de Energía. En cualquier caso, se están realizando investigaciones en nuestra División, en la de Desarrollo Rural y Cooperativas y en el Instituto de Tecnologías Apropiadas, establecido en la Universidad de Ingeniería. Por nuestra parte, hemos tratado de introducir la tecnología del biogás en el Bangladesh rural. En este sector existen limitaciones, pues aunque la tecnología no es nueva -ya cuando yo iba a la escuela, sabia lo que era el biogás- resulta difícil hacer que sea comercialmente viable a nivel de los agricultores. Una familia no puede hacer frente sola a la inversión inicial. Mediante una acción comunitaria colectiva es posible encontrar fuentes más baratas de energía a partir del mismo material, pero en este caso el problema principal es organizar a la comunidad.
También hemos realizado experimentos con la energía solar. Sin embargo, durante la temporada del monzón, cuando las necesidades energéticas son altas, la energía solar no se obtiene fácilmente, lo cual es una desventaja. También estamos pensando utilizar molinos de viento en ciertas zonas, pero una vez más observamos que en nuestras condiciones la viabilidad económica o comercial de tales proyectos no está aún demostrada. Como usted sabe, incluso los países más avanzados no han llegado todavía a soluciones claras.
El bosque de manglares de Sundarban, que representa al menos el 50% de la superficie forestal total de Bangladesh, es e/mayor de su especie en e/mundo y constituye un recurso nacional importantísimo No sólo proporciona leña, sino que sirve asimismo como elemento esencial de protección contra los ciclones y las olas provocadas por las mareas altas; es un refugio para especies raras de fauna silvestre; produce nutrientes básicos para la fauna marítima costera, y representa una atracción turística potencial. ¿Podría decimos algo sobre su ordenación?
Si, Sundarban es un bosque único cuya ordenación en el pasado se hacia considerándolo sólo como bosque natural. Durante los últimos dos o tres decenios, se han venido produciendo ciertos cambios ecológicos. Como consecuencia, hemos llegado a la conclusión de que el programa de explotación que se había desarrollado hace casi cien años ya no era viable; ese plan se basaba en ciertos factores que, de hecho, habían cambiado. La presa de Farraka en la India, que desvía las aguas del río Ganges, contribuyó a aumentar el nivel de salinidad y ello ha afectado el proceso de regeneración de ciertas especies, como la sundari. Actualmente hemos iniciado un programa de plantación para contrarrestar ese fenómeno.
PARTE DE LOS MANGLARES DE SUNDARBAN un país donde predomina el agua (CHRISTENSEN)
También hemos estado tratando de ampliar su superficie. En 1961, después del ciclón devastador de 1960, se inició el primer proyecto para la repoblación costera de la vasta zona fuera de los limites de Sundarban. En esa zona están surgiendo nuevas tierras debido a la sedimentación de limo. Durante el ciclón, las zonas cubiertas por el bosque Sundarban resultaron seguras; las víctimas y los daños registrados fueron escasos. Sin embargo, en las demás zonas los estragos fueron increíbles. Los habitantes murieron a millares debido a las grandes olas provocadas por la subida de la marea.
En 1961 sólo había un objetivo: crear un cortavientos para proteger los diques. En 1974 ese objetivo cambió; la recuperación de tierras pasó a ser otro objetivo importante. Así pues, hemos ido experimentando distintas especies a fin de determinar cuál es la más idónea para contribuir a estabilizar las superficies de tierras inestables de reciente formación. Iniciamos la primera fase del proyecto con la ayuda del Banco Mundial, y ahora nos proponemos pasar a la segunda. Teniendo en cuenta la falta de una investigación complementaria, el experimento ha sido bastante positivo. En el próximo decenio, esperamos llegar a cubrir debidamente toda la zona costera.
¿Podría describir las técnicas que se emplean para aprovechar las tierras recuperadas en Sundarban?
Estamos tratando de duplicar la labor de la naturaleza. El limo transportado por los sistemas fluviales del Ganges y el Brahmaputra se deposita, con lo que aumenta la superficie de las tierras. Estas deben fijarse mediante la vegetación. En el curso de nuestros estudios hemos visto que el primer elemento de la colonización primaria es una variedad de hierba con gran tolerancia a la salinidad, denominada uri. Las semillas de la hierba uri flotan en el agua, se mueven con la marea y encuentran lugares adecuados de asentamiento. Como la hierba uri crece muy espesa, contribuye a la acumulación de más limo, con lo que a su vez comienza a estabilizarse la tierra.
En realidad, el bosque de Sundarban se ha ido ampliando hacia el sur durante siglos de manera automática, porque las semillas de la mayor parte de las especies que constituyen el manglar flotan también en el agua salada. Cuando encuentran una zona ya colonizada por la hierba uri, quedan atrapadas en ella y echan raíces allí. Así es como se extiende el manglar. Actualmente, nosotros utilizamos esta tecnología para propagar especies diferentes en las tierras de reciente formación, separadas por corrientes debidas a la marea. Las semillas flotan, pero no pueden desplazarse de oeste a este a través de la barrera que forma la corriente. Así pues, lo que se necesita es simplemente compensar esa dificultad, y es esto lo que se ha empezado a hacer.