El turismo generó en 1998 el 45% de las divisas de la República Dominicana, ascendente a US $ 2mil 141.7 millones. Es el país más visitado en la región por los Europeos (Rainieri, 1999).
En la década de los ochenta se despierta un interés para visitar los Parques Nacionales y al inicio de los años noventa se crea la unidad de ecoturismo en la Dirección Nacional de Parques. A partir de aquí se realizan varias actividades sobre ecoturismo: talleres, congresos, creación de la Comisión Nacional de Ecoturismo e inicio de la carrera maestría en Ecoturismo en Universidad Autónoma de Santo Domingo (estatal), entre otras.
En la actualidad existen más de veinte proyectos ecoturísticos en el país. A continuación algunos de los más importantes:
Jarabacoa, Provincia de La Vega. Este es un lugar de aventuras, ubicado en un valle intramontano del principal sistema montañoso del país, la Cordillera Central, cuya especie nativas principal es el Pinus Occidentalis. La visitación mensual está entre 8,000 a 10,000 turistas para practicar rafting, cabalgatas, conyoning, parapente, mountain bike, tubing y montañismo, entre otros. Las comunidades rurales participan alquilando caballos, como guías de cabalgatas (especialmente los niños), choferes, guías de aventuras y montañismo, vendiendo la producción agrícola, ofertando pinturas paisajísticas, como cocineras, etc. El ecoturismo ha dinamizado la economía de la zona. Los ingresos anuales aproximados que genera la visita de los más de 100,000 turistas ascienden a US$6 millones.
Provincia de Samaná, con cinco comunidades rurales organizadas en una asociación como micro-empresas ecoturística para ofertar el Salto de Limón. Además de las cascadas se oferta alimentos, bebidas, caballos, artesanía, venta de café y cacao gourmet. En el año 1998 recibieron más de 20,000 turistas.
Reserva científica Ebano verde. Area con característica de parque nacional, en altura, siempre húmedo, santuario de la especie endémica Ebano verde (magnolia palescens), administrado bajo fideicomiso del Gobierno dominicano con la Fundación Progressio (ONG).
Parque J. Armando Bermúdez. El mayor parque nacional, en el centro de la isla, con el pico más grande las Antillas, Pico Duarte, 3,187 m sobre el nivel del mar, dominado amplios bosques de coníferas y latifoliadas en el curso de ríos y arroyos, visitado durante todo el año, por turistas nacionales y extranjeros. Reviste una fuente importante de ingreso para el sector turismo.
Parque Nacional Los Haitises. Ubicado en el nordeste del país, con formaciones cársticas especiales, la mayor pluviometría de la isla (cerca de 4000 mm anuales). Se combina con el área turística de Samaná para ofertarlo como ruta para turismo ecológico. Significa una importante fuente del ingreso.
Parque Nacional del Este. Ubicado en el extremo oriental de la isla, cerca de los mayores complejos turístico y resortes del país, junto a la Isla Saona, es una de las fuentes de ingreso más importante parra el servicio no maderable de turismo ecológico.
Otras zonas menores como Loma Isabel de Torres, Ruta ecológica Santiago-Puerto Plata, Pico Diego de Ocampo, Reserva científica Valle Nuevo Constanza, entre otras son puntos de interés y de constante uso como visita para el turismo ecológico.
En resumen para el año 1998 más de 1,000,000 turistas realizaron actividades ecoturísticas, con ingresos para el país de alrededor de US$41 millones por este concepto (Troncoso, 1999).
Esta actividad incluye la caza de aves silvestres como palomas, tórtolas, guineas, y otros vertebrados como puercos cimarrones, en algunas zonas del país, frecuentada por aficionados nacionales en determinados períodos del año.
Ha ido en disminución al desaparecer el hábitat de la mayoría y hoy se relega a zonas remotas dentro de los parques nacionales o zonas de bosque seco del Noroeste y del sur del país.
Sin embargo, además del servicio que presta el bosque, los productos de la caza alcanzan valores atractivos en restaurantes capitalinos o en las zonas turísticas. Igual que en los casos anteriores nos fue posible adquirir cifras de los valores de los productos o del número de aficionados que frecuentas las zonas. Tampoco existe registros o licencias para practicar el deporte de caza.