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perspectivas alimentarias | |
No. 2 | Rome, abril 2003 |
Utilización
Se estima que en 2001/021/ la utilización mundial de cereales ha alcanzado los 1 950 millones de toneladas, o sea alrededor de un 2 por ciento más que en la campaña comercial anterior, pero por debajo de la tendencia. A los países desarrollados se atribuye algo más de la mitad de los 33 millones de toneladas que aumentó la utilización total, principalmente en concepto de piensos y otros usos. El crecimiento del consumo humano de cereales, a 973 millones de toneladas, se debió a un crecimiento moderado (1 Kg.) del consumo anual por habitante a 160 kg. También aumentó, en un 2 por ciento, la utilización mundial de piensos hasta alcanzar los 710 millones de toneladas, mientras que los otros usos de cereales se estima que han crecido en un 3 por ciento.
Comoeshabitual, lospaísesendesarrollo representaron la mayor parte del incremento del consumohumanodecereales, estimándosequeen 2001/02 su consumo total ha aumentado a 798 millones de toneladas, o sea aproximadamente 12 millones de toneladas más que en la campaña anterior. De confirmarse esta estimación, su consumo de alimentos por habitante sería de 167 Kg., uno más que en la campaña anterior. En los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos (PBIDA), considerados por la FAO como el grupo de países más vulnerables a la inseguridad alimentaria, el consumo humano anual de cereales por habitante se ha estabilizado en 168 kg. Sin embargo, si se considera este grupo de países sin China (Continental) y la India, con los cuales se distorsionan excesivamente los númerostotales,enrealidadel consumo humano anual de cereales por habitante mejoró en 1 Kg. a 158 kg. Utilización mundial de cereales
Fuente: FAO
Nota: Los totales se han calculado a partir de datos no redondeados.
1/ Para consumo humano directo.
2/ Entre los otros usos figuran semillas, usos industriales y desechos.
El aumento de los suministros, debido a las cosechas mejoradas de 2001, corresponde al incremento estimado en el consumo humano de cereales registrado en los países en desarrollo de África y Asia durante la campaña de 2001/02. En África, el incremento de alrededor de un 3 por ciento del consumo se debió a unas condiciones agrícolas en general mejores registradas en los países subsaharianos y en la mayor parte de África del Norte. En cuanto a Asia, se estima que en la última campaña la ingesta humana de cereales aumentó solamente un 1 por ciento. En China (Continental), el consumo directo de cereales continúa siendo débil debido al éxodo rural hacia centros urbanos y al aumento de los ingresos que alienta la demanda de otros alimentos. Sin embargo, en Bangladesh, la India, Indonesia, Pakistán y Viet Nam se registraron mejoras significativas en el consumo humano de cereales. Según las estimaciones, en América Latina y el Caribe el consumo humano de cereales ha aumentado en alrededor de un 2 por ciento en 2001/02, principalmente en el Brasil y México, los dos principales consumidores de cereales de la región. Consumo humano per capita de cereales
Fuente: FAO
Según las estimaciones, en 2001/02 la utilización mundial de piensos ha aumentado en un 2 por ciento, o sea alrededor de 14 millones de toneladas. La mayor parte del avance se debe a una mayor demanda registrada en Asia, la CEI y Europa oriental. Es probable que los bajos precios internacionales conjugados con la obtención de cosechas excelentes en algunos países hayan contribuido a una mayor utilización interna de cereales forrajeros en la CEI y Europa oriental. Tres cuartas partes del incremento mundial corresponden a la CEI, donde Kazajstán, la Federación de Rusia y Ucrania, en particular, se beneficiaron de unas cosechas abundantes de cereales en 2001. En el Brasil, la India, la República Islámica del Irán, México, Rumania y la Serbia y Montenegro la utilización de piensos se vio alentada por el aumento de las cosechas de cereales secundarios. En el caso del Brasil, la fuerte demanda de carnes para el consumo interno y la exportación también contribuyó a acrecentar la demanda de piensos. En la República de Corea y en Arabia Saudita la baja de los precios promovió la demanda de piensos en 2001/02. En cambio, algunos de los principales países productores de cereales experimentaron una contracción de la utilización de cereales forrajeros por diversas razones. Según los informes, en los Estados Unidos la utilización de piensos de cereales disminuyó en un 2 por ciento y en la UE en un 1 por ciento con respecto a la campaña anterior. En los Estados Unidos, se señala que la utilización de piensos ha descendido debido principalmente a una reducción de la cabaña. Aunque las existencias de piensos de la UE aumentaron debido a las grandes importaciones de trigo forrajero proveniente de Europa oriental y de los países de la CEI, no fueron suficientes para contrarrestar la fuerte merma de la producción de trigo en 2001 y la insuficiencia de suministros de piensos sucedáneos, como la yuca y la harina de maíz. Se estima que en China la utilización de cereales forrajeros ha disminuido en un 1 por ciento, pero el descenso hubiera sido mayor si una gran parte de los 2 millones de toneladas menos de maíz forrajero no se hubiera reemplazado con trigo.
La utilización industrial del maíz continuó aumentando constantemente en algunos países como efecto de la creciente demanda de alimentos, piensos y combustibles sustitutivos. En los Estados Unidos, según fuentes oficiales, el maíz utilizado para producir jarabe de glucosa rico en fructosa ha aumentado en un 2 por ciento en 2001/02, mientras que los aditivos para combustibles a base de maíz (principalmente etanol), que constituyen la utilización industrial de cereales más importante de los Estados Unidos, aumentaron bruscamente casi un 14 por ciento. Este último aumento se atribuye a una mayor utilización de capacidad y a la creación de nuevas fábricas respaldadas por los programas federales para la promoción de combustibles sustitutivos. Es posible también que el aumento de los precios del petróleo haya alentado a los proveedores a utilizar combustibles sucedáneos más baratos. En China, la utilización industrial de cereales continuó aumentando en 2001/02, pero el uso de semillas y las pérdidas poscosecha disminuyeron debido a unas cosechas más exiguas.
La utilización mundial de cereales en 2002/03 se pronostica en 1 947 millones de toneladas, lo que representa un volumen marginalmente inferior al de la campaña anterior y ligeramente inferior a la tendencia. Según las previsiones, el volumen de los cereales utilizados para el consumo humano aumentará sólo moderadamente, mientras que la utilización mundial de piensos y los otros usos podrían contraerse. Sin embargo, entre los cereales principales un hecho novedoso ha sido el incremento repentino de la utilización del trigo como forraje, que se explica por la abundancia de los suministros y por los precios más competitivos en relación con los del maíz en los mercados internacionales.
Según los pronósticos, en los países en desarrollo tomados en su conjunto el consumo humano de cereales aumentará sólo en alrededor de 0,5 por ciento a 803 millones de toneladas, lo que implica que el consumo humano de cereales por habitante disminuirá en 1 Kg. con respecto a 2001/02. Sin embargo, en los PBIDA (excluidas China y la India) el consumo humano de cereales podría mejorar, con un aumento de su consumo medio por habitante a 159 kg. La mayor parte del incremento total del consumo humano debería de registrarse en los países en desarrollo de Asia, en los que alcanzaría los 616 millones de toneladas aproximadamente, en particular en las regiones meridionales y sudorientales. La India es la única excepción importante porque se prevé una disminución del consumo humano de cereales debida a las malas cosechas de arroz y cereales secundarios obtenidas en 2002. En África, el consumo humano de cereales podría aumentar en un 2 por ciento hasta alcanzar los 116 millones de toneladas, previéndose que una gran parte del avance se registrará en el África austral tras una campaña de producción deficitaria y debido a los disturbios civiles que afectan a la subregión. Los niveles de consumo en la subregión dependerán también de la cantidad de ayuda alimentaria en cereales que se reciba durante el año. En la región de América Latina y el Caribe el consumo humano de cereales podría aumentar marginalmente a 71 millones de toneladas.
Tras el aumento registrado en 2001/02, es probable que la utilización mundial de cereales para pienso constituya el sector de la utilización mundial más afectado en 2002/03, ya que se prevé un descenso de 5 millones de toneladas a 705 millones de toneladas. Toda la disminución debería de registrarse en los países desarrollados y en los países en transición económica. En los Estados Unidos, la utilización de cereales forrajeros debería de disminuir en un 5 por ciento a causa de la contracción de la cabaña y de la menor utilización de piensos por unidad de ganado, debida en parte al alza de los precios de los cereales forrajeros con respecto a la campaña anterior. Como se indicaba en marzo, la utilización canadiense de cereales forrajeros podría disminuir en un 8 por ciento en la presente campaña, debido en gran parte a la grave sequía que afectó al país en 2002. Según los pronósticos, el aumento de la utilización del maíz y el trigo como pienso contribuirá a contrarrestar las fuertes disminuciones registradas en otros granos pienso, en particular la cebada. Australia está haciendo frente también a una disminución de las disponibilidades de cereales a causa de las malas cosechas, lo cual podría reducir la utilización de piensos, en particular de trigo. Se pronostica que el aumento de los piensos a base de cereales secundarios compensará sólo en parte el descenso del 13 por ciento registrado en los de trigo. Según se prevé, la UE aumentará en alrededor de un 2 por ciento su utilización total de cereales forrajeros en 2002/03, pese a la reducción registrada en la utilización de cereales secundarios. Los precios favorables y la mayor demanda de productos proteicos sucedáneos, debida a la prohibición de las harinas de carne y de huesos en las raciones forrajeras, deberían de imprimir un fuerte impulso a la demanda de trigo forrajero en la presente campaña. Según se prevé, las cosechas más abundantes obtenidas en 2002 y las restricciones impuestas a las importaciones de carne deberían de reactivar la utilización interna de cereales forrajeros en muchos países de la CEI, especialmente Belarús,Kazajstán,laFederacióndeRusiay Uzbekistán. También se supone que las cosechas mejoradas incrementarán la utilización de cereales forrajerosenalgunospaísesasiáticos,especialmente enlaRepúblicaIslámicadelIrány Viet Nam. A pesar de la merma prevista en la producción de maíz del Brasil, la demanda de piensos debería de continuar creciendo para sostener la expansión de la industria avícola. 1. La utilización mundial en 2001/02 es la suma de las campañas comerciales nacionales que terminan en 2002. 2. Los “otros usos” de cereales incluyen la utilización de semillas, las pérdidas poscosecha y los usos industriales. Las pérdidas poscosecha tienden a fluctuar en función de las variaciones registradas en la producción, en particular en los países en desarrollo. La demanda de productos no alimenticios a base de cereales está determinada principalmente por factores ajenos al sector agrícola. |