Nuevo subdirector general del departamento de montes de la FAO
El director general de la FAO convoca una reunión de expertos de alto nivel en temas forestales
Conclusiones y recomendaciones del cuadro de expertos
El Dr. David A. Harcharik ha sido designado por el Director General de la FAO, Jacques Diouf, nuevo Subdirector General del Departamento de Montes. El Dr. Harcharik, ciudadano de los Estados Unidos, tiene más de 20 años de experiencia internacional en el sector forestal. Su carrera internacional comenzó con los Peace Corps de los Estados Unidos en el Perú, donde trabajó durante dos años (1965-1967) como profesor visitante de la Universidad Nacional Agraria, enseñando y dirigiendo investigaciones aplicadas en silvicultura tropical. Posteriormente fue contratado por la FAO y trabajó en la Sede de la Organización en Roma, como oficial forestal en repoblación forestal y mejoramiento de árboles durante más de cinco años.
En 1981, pasó a formar parte del Servicio Forestal del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, actuando como coordinador para América Latina del personal internacional del Programa de Apoyo Forestal (FSP), y tuvo bajo su cargo la coordinación de la asistencia técnica de la comunidad forestal profesional de los Estados Unidos a los proyectos de desarrollo de ultramar de la Agencia para el Desarrollo Internacional de los EE.UU. (USAID). En 1982 pasó a ser Gerente de Programa del FSP y de 1984 a 1991 fue director de actividades forestales internacionales. Cuando en 1992 las actividades forestales internacionales se elevaron al rango de subdirección, el Sr. Harcharik se convirtió en subdirector adjunto y, posteriormente, en subdirector interino.
Su carrera internacional lo ha llevado a muchos países de todo el mundo y lo ha hecho participar en actividades técnicas relacionadas con la silvicultura y la mejora de árboles, en la preparación y planificación de proyectos, intercambio científico y desarrollo normativo. Ha realizado también trabajos durante un corto periodo para el Banco Mundial y el Programa Mundial de Alimentos, y ha trabajado asimismo en los Estados Unidos para una empresa forestal de consultores privados y para la North Carolina State University.
Ha trabajado en Comité Forestal Mundial y en el Grupo de Trabajo de Actividades Forestales Internacionales de la Society of American Foresters, la Junta Directiva de la American Forestry Association y el Consejo Asesor Estratégico de la Escuela Forestal de la Yale University.
El Dr. Harcharik sustituye al Subdirector General, Sr. C. Hollis Murray, que se jubiló a mediados de 1994.
La desaparición y degradación de los bosques y la preocupación que existe a nivel mundial en torno a la ordenación racional de los bosques han dado un fuerte impulso internacional a las cuestiones relativas a la conservación y desarrollo de los bosques.
La Comisión de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (CDS), creada para fomentar las actividades complementarias de la CNUMAD y la revisión periódica de los progresos realizados, ha confiado a la FAO la función de Gerente de Tareas dentro del sistema de las Naciones Unidas para la aplicación de las decisiones en campo forestal. En su 103° periodo de sesiones de junio de 1993, el Consejo de la FAO aprobó un programa de trabajo adaptado a las actividades forestales para garantizar que se reflejaran en él los acuerdos de la CNUMAD, y en su 27° periodo de sesiones de noviembre de 1993, la Conferencia de la FAO recomendó que «la FAO asuma una función directiva en el proceso preparatorio para la aplicación de [...] los Principios Forestales».
|
Situación de los bosques del mundo Tal como ha recomendado el Cuadro de Expertos de Alto Nivel en Temas Forestales, la FAO ha preparado el primer número de La situación de los bosques en el mundo, como información básica para el 11° período de sesiones del Comité de Montes y la Reunión Ministerial conexa. El objetivo del documento es exponer algunos de los más importantes problemas normativos con que se enfrenta la comunidad internacional y resumir los principales sectores de información práctica. En la presentación se reúne información procedente de la Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales de 1990, el Anuario FAO de productos forestales, el capítulo especial de El estado mundial de la agricultura y la alimentación 1994, titulado «Dilemas del desarrollo y las políticas forestales» (véase el artículo), el capítulo destinado a cuestiones forestales de Agriculture towards 2010, y El desafío de la ordenación forestal sostenible. Perspectivas de la silvicultura mundial. Además, se incluyen dos análisis regionales, sobre Europa y América Latina y el Caribe, presentados en las reuniones regionales sobre cuestiones forestales de la FAO. En los próximos números se examinarán, a su vez, las otras regiones y se incluirán análisis de los aspectos especialmente acuciantes de la situación forestal en el mundo. |
Con estos antecedentes, el Director General de la FAO convocó un Cuadro de Expertos Externos de Alto Nivel en Temas Forestales en Roma, del 19 al 21 de octubre de 1994, con el fin de obtener apoyo estratégico sobre la forma en que la FAO podría facilitar y apoyar más eficazmente el diálogo internacional sobre cuestiones forestales y conexas; participar con mayor eficacia en la orientación de los debates sobre cuestiones forestales y prestar asistencia a los Estados Miembros para la formulación y ejecución de planes y programas sostenibles de acción forestal nacional.
El Cuadro de Expertos recomendó a la FAO que aprovechara plenamente la oportunidad que le ofrecía la función de Gerente de Tareas que le ha asignado la CDS y, sobre todo, la próxima reunión de ésta que se celebrará en 1995 para reafirmar su apoyo, y que reforzara su asociación y cooperación con otros agentes principales del sector. Uno de los beneficios clave de esa función es el mantenimiento del impulso a la gran prioridad asignada al sector forestal en altos niveles políticos y decisorios. Además, el Cuadro de Expertos formuló una serie de recomendaciones relativas a las principales esferas del mandato constitucional de la FAO: acopio, análisis y difusión de información; servir de foro para el diálogo internacional y proporcionar asesoramiento en materia de políticas y planificación así como asistencia técnica. El Cuadro de Expertos reconoció que la aplicación de sus recomendaciones tendría repercusiones significativas en lo que se refiere a los recursos humanos y financieros y, dada la alta prioridad concedida al desarrollo forestal, sugirió que estaría plenamente justificada la provisión de más recursos para la labor de la FAO en el sector, tanto procedentes del Programa Ordinario como de fuentes extrapresupuestarias.
Acopio, análisis y difusión de información. El Cuadro de Expertos instó a que se tratara de aumentar la capacidad de la FAO en lo que respecta a la recopilación, verificación, síntesis, interpretación y distribución de datos estadísticos sobre cuestiones forestales. Dada la importancia decisiva de disponer de datos fidedignos y la indiscutible función de liderazgo de la FAO en la evaluación de los recursos forestales mundiales, el Cuadro de Expertos recomendó que la FAO evaluara sistemáticamente y utilizara los datos básicos proporcionados por los países y organizaciones de investigación independientes de reconocida solvencia. El Cuadro de Expertos reconoció la ventaja comparativa de la FAO en la creación de capacidad y recomendó que la Organización redoblara sus esfuerzos para reforzar la capacidad de los gobiernos nacionales, sobre todo en los países en desarrollo, de recoger datos cuantitativos confiables que incluyan tasas volumétricas y de crecimiento. Además, habría que ampliar el campo de acción de la evaluación de recursos forestales para que incluyera más rasgos cualitativos como por ejemplo los factores ambientales y el valor de los productos no madereros, así como la identificación de los bosques degradados y de las zonas destinadas a la repoblación forestal, y los datos necesarios para evaluar los efectos de los gases de invernadero sobre los bosques y el posible papel positivo de éstos como sumideros de carbono.
El Cuadro de Expertos convino en la necesidad de formular criterios e indicadores para la ordenación sostenible de los bosques, e instó a la FAO a que recogiera inmediatamente información sobre las iniciativas en curso, y tratara de facilitar las actividades convocando reuniones o seminarios para examinar determinadas lagunas existentes, convergencias y divergencias y para formular propuestas de acciones futuras antes de la reunión del CDS en 1995.
Foro para el diálogo internacional. Se examinó la posibilidad de convertir los Principios Forestales de la CNUMAD en un acuerdo internacional vinculante sobre los bosques. Se reconoció asimismo que existen puntos de vista divergentes sobre este tema y se recomendó a la FAO que preparara un documento equilibrado en el que se incluyeran las ventajas e inconvenientes de tal enfoque con el objetivo final de iniciar un proceso de negociación internacional.
El Cuadro de Expertos recomendó también a la FAO que realizara un estudio y evaluación independiente de los términos de referencia, resultados, importancia actual y repercusión de sus comités y órganos relacionados con el sector forestal, y que las Comisiones Regionales de la FAO se convirtieran en foros regionales más eficaces para la cooperación y colaboración, sobre todo en la preparación de análisis estratégicos y de propuestas de acción.
Asesoramiento en materia de políticas y planificación y asociación para la asistencia técnica. Se subrayó la importancia de la función de la FAO en lo que respecta al asesoramiento en materia de políticas a los países y los debates internacionales sobre los bosques. En este contexto, se recomendó a la FAO que preparara periódicamente un informe sobre la situación de los bosques en el mundo de manera de constituir una fuente reconocida orientada hacia las políticas en el que se incorporaran los resultados y planes de la Organización así como sus recomendaciones a otros agentes. Se incluirían en dicho informe cuestiones oportunas de importancia especial (véase el recuadro «Situación de los Bosques del Mundo»).
El Cuadro de Expertos reconoció la contribución realizada por el PAFT como marco de planificación a través de las distintas etapas de desarrollo y evolución, y opinó que habría que ampliar el ámbito de actuación del PAFT para que abarcara todos los tipos de bosques. Asimismo recomendó a la FAO que continuara fomentando y apoyando al PAFT y que integrara a éste en sus actividades normales de planificación y programación, sobre todo en las etapas iniciales del proceso continuo de los servicios de la FAO en el sector forestal a nivel nacional.
