Panorama de la situación alimentaria de los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos ^1/

La production céréalière totale des PFRDV se redresse après le recul de l'an dernier

El pronóstico más reciente de la FAO relativo a la producción de cereales de 2008 para los 82 PBIDA como grupo apunta a un aumento del 2 por ciento respecto de 2007. Si se excluyen los productores mayores, China y la India, que normalmente representan una tercera parte de la producción total, la producción del resto de los PBIDA aumenta en un 3,3 por ciento, lo cual es un hecho positivo tras la merma de la producción registrada el año pasado. Sin embargo, la situación varía mucho entre las subregiones, ya que se prevén aumentos notables en la producción total de los grupos de PBIDA de África, Europa y América Central, pero una merma en el grupo asiático.

En los PBIDA de África occidental, la producción de cereales de 2008 se estima un 14 por ciento mayor que el año anterior, debido al tiempo favorable imperante durante el período vegetativo y a las medidas aplicadas en apoyo a la producción. En Nigeria, que representa más de la mitad de la producción de la subregión, la producción aumentó en un 8 por ciento gracias al vasto programa de compra de fertilizantes del Gobierno, destinado a garantizar su disponibilidad durante la campaña agrícola. En los nueve países de la subregión del Sahel, la producción de cereales aumentó en cerca de una tercera parte, principalmente en el Senegal, el Níger y Burkina Faso, donde este año los gobiernos también acometieron diversos programas de apoyo a la producción agrícola. En África del Norte, la producción de cereales de 2008 aumentó en Egipto, el mayor productor de la subregión, tras un aumento significativo de las plantaciones de trigo y arroz. En Marruecos, la producción cerealera se duplicó con creces con respecto al nivel reducido por la sequía de 2007, pero se mantuvo un 20 por ciento por debajo de la media. En África oriental, la producción de cereales se pronostica levemente superior al nivel bueno del año pasado. En Etiopía, pese a las preocupaciones anteriores por el retraso de la estación de lluvias, el pronóstico más reciente cifra la producción cerealícola un poco por debajo de la cosecha sin precedentes de 2007. A nivel subregional, la merma se ve compensada por un aumento del 20 por ciento en la producción de cereales del Sudán, en particular la cosecha de trigo de regadío que aumentó un 53 por ciento. En cambio, en Kenya y Somalia la producción se mantuvo a niveles reducidos debido a las precipitaciones irregulares y al costo elevado de los insumos agrícolas. En África austral, la producción agregada de los PBIDA descendió en un 6 por ciento con respecto al nivel bueno del año pasado, debido principalmente a la reducción de una tercera parte en Zimbabwe, afectado por el tiempo seco, y a una grave escasez de insumos agrícolas.

En Asia, los resultados de la producción cerealera de este año son variados. En los PBIDA del Lejano Oriente asiático, se obtuvo una producción buena en casi todos los países, con la excepción de la República Democrática de Corea, donde a pesar del tiempo favorable la producción disminuyó en un 8 por ciento con respecto al nivel satisfactorio del año pasado debido a una crítica escasez de fertilizantes y combustible. En China, la India, Indonesia y Filipinas, que son los mayores productores, unos incrementos moderados de la producción con respecto a los niveles buenos del año pasado dieron lugar a cosechas sin precedentes. Gracias a un importante apoyo de los Gobiernos que aportaron insumos agrícolas, aumentó la producción agrícola en Bangladesh y Sri Lanka. En el Cercano Oriente, la producción de cereales se vio drásticamente reducida por la sequía en la República Árabe Siria, el Iraq y el Afganistán, donde las producciones disminuyeron en un 53, 40 y 35 por ciento respectivamente. Análogamente, en los PBIDA de la CEI asiática, el tiempo seco menguó las cosechas en Tayikistán y Uzbekistán. En América Central y el Caribe, se obtuvieron producciones de cereales satisfactorias en Honduras y Nicaragua, pero en Haití la producción disminuyó ligeramente. En los PBIDA de Europa, se obtuvieron cosechas excelentes, principalmente en Moldova y Belarús.

Las necesidades de importaciones de cereales se mantienen altas, pero es probable que los costos de importación disminuyan debido a los precios internacionales más bajos

Habiendo comenzado ya la nueva campaña en casi todas las subregiones, la necesidad total de importaciones de cereales de los PBIDA como grupo para la campaña comercial 2008/09 ó 2009 se estima en 85,4 millones de toneladas, aproximadamente un 3 por ciento más que el año pasado, pese a la producción mejorada en 2008. Ello refleja el incremento de más de 4 millones de toneladas previsto en los países del Cercano Oriente, en los que la sequía devastó la producción de este año. Análogamente, las importaciones de cereales deberían ser mayores en África austral, principalmente en Zimbabwe, donde se estima que las necesidades de importaciones son un 75 por ciento mayores que el año pasado. Estos aumentos compensan con creces la disminución de las necesidades de importaciones en los países del Lejano Oriente asiático, principalmente Bangladesh, China, la India e Indonesia, así como en Europa, donde se obtuvieron excelentes cosechas de cereales en 2008. En África del Norte, el nivel de las importaciones de Marruecos seguirá siendo alto, ya que la producción de este año se recuperó sólo parcialmente. Debido, sin embargo, a la brusca disminución de los precios internacionales en el segundo semestre de 2008, se pronostica que la factura agregada de las importaciones de cereales de los PBIDA disminuirá en 2009, tras haber aumentado en un 35 por ciento en 2008 a un récord de 34 millones de dólares USD.

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¹ El grupo de países de bajos ingresos y con déficit de alimentos (PBIDA) abarca los países deficitarios de alimentos con un ingreso anual per cápita inferior al nivel utilizado por el Banco Mundial para determinar el derecho a recibir la asistencia de la AIF (es decir 1 675 de USD en 2005). De conformidad con las directrices y criterios acordados por el CPA, estos países han de tener la prioridad en la asignación de la ayuda alimentaria.