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El sol se pone sobre una granja piscícola de Lira (Uganda).
© FAO

La FAO en la agenda mundial de acción para el clima

Los sistemas agroalimentarios son un elemento central de las soluciones a la crisis climática

Afrontar la crisis climática es un acto de equilibrismo: debemos hacer frente a los efectos del cambio climático en los sistemas agroalimentarios y, al mismo tiempo, mitigar el efecto de los sistemas agroalimentarios en el medio ambiente.

La FAO trata de mejorar su apoyo a los Estados Miembros en el ámbito de la adaptación al cambio climático y la mitigación de sus efectos, a fin de que logren sistemas agroalimentarios resilientes al clima y con bajas emisiones. Al mismo tiempo, trabaja arduamente para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y, en particular, para erradicar el hambre y la malnutrición (ODS 2).

Para que los sistemas agroalimentarios sean más eficientes y sostenibles, es necesario replantear las políticas agrícolas actuales, impulsar la innovación y revolucionar los enfoques en la gestión de los sistemas agroalimentarios.

Classification of forest products 2022 book
Contribución de los sistemas agroalimentarios al total de las emisiones antrópicas
Fuente: FAO. 2023. Agrifood systems and land-related emissions. Global, regional and country trends, 2001-2021. FAOSTAT Analytical Briefs, N.o 73. Roma.
Marco estratégico de la FAO para 2022-2031

Marco estratégico de la FAO para 2022-2031

El Marco estratégico de la FAO para 2022-2031 es una respuesta al auge de la demanda mundial de sistemas agroalimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles.

En el documento se subraya la importancia de adoptar modalidades de consumo y producción sostenibles a través de cadenas de valor agroalimentarias eficientes e inclusivas.

Entre las esferas programáticas prioritarias del Marco estratégico, un “mejor medio ambiente” comprende la mitigación de los efectos del cambio climático y la adaptación a este de la agricultura y los sistemas alimentarios; la bioeconomía para la alimentación y la agricultura sostenibles; la biodiversidad y los servicios ecosistémicos para la alimentación y la agricultura, y los sistemas alimentarios urbanos sostenibles.

Estrategia de la FAO sobre el cambio climático

La Estrategia de la FAO sobre el cambio climático forma parte del Marco estratégico.

Incluye principios rectores que abarcan todos los ámbitos de los sistemas agrícolas (la agricultura, la ganadería, la pesca y la acuicultura, y la actividad forestal). Algunos de estos principios se refieren a la necesidad de que la innovación esté impulsada por los países y de que las políticas se basen en criterios científicos, teniendo en cuenta las perspectivas y las necesidades de los agricultores, los ganaderos, los pescadores, los acuicultores y las personas que dependen de los bosques.

La Estrategia de la FAO sobre el cambio climático adopta un enfoque que tiene en cuenta el contexto, la diversidad y la capacidad, y reconoce que no existe una solución universal aplicable a todas las situaciones.

La alimentación y la agricultura en la agenda mundial de acción para el clima

El Acuerdo de París de 2015 refuerza la respuesta mundial ante la amenaza del cambio climático al proseguir los esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura media mundial a 1,5 °C.

La agricultura y la seguridad alimentaria ocuparon un lugar destacado en el programa de la 27.a Conferencia de las Partes (COP 27) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), celebrada en Egipto a finales de 2022.

Las deliberaciones de Sharm El Sheikh concluyeron en la hoja de ruta de la Labor conjunta de Koronivia sobre la agricultura, un enfoque multisectorial de las Naciones Unidas que coloca la agricultura en el centro de la lucha contra el cambio climático. Asimismo, se estableció un nuevo período de cuatro años para la labor conjunta de Sharm el‑Sheikh sobre la aplicación de la acción por el clima en la agricultura y la seguridad alimentaria, a fin de trabajar en cuestiones relacionadas con la agricultura y la seguridad alimentaria, centrándose en la labor de aplicación.

La FAO y Egipto pusieron en marcha conjuntamente la iniciativa Alimentación y agricultura para una transformación sostenible (iniciativa FAST), con el objetivo de respaldar la acción por el clima en el ámbito de los sistemas agroalimentarios en torno a tres pilares, a saber:

  1. el acceso a financiación e inversiones;
  2. el desarrollo de conocimientos y capacidades;
  3. el apoyo en materia de políticas y el diálogo sobre políticas.

La iniciativa FAST ayudará a la aplicación de las contribuciones determinadas a nivel nacional, los planes nacionales de adaptación y las estrategias a largo plazo para el desarrollo con bajas emisiones.

Programas mundiales de la FAO sobre el cambio climático en la agricultura

El programa Ampliación de la ambición climática en el uso de la tierra y la agricultura a través de contribuciones determinadas a nivel nacional y planes nacionales de adaptación es una iniciativa conjunta de la FAO y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

A través de este programa se presta apoyo a países de África, América Latina y Asia en el desarrollo de la capacidad de adaptación y la reducción de las emisiones de GEI, a fin de que alcancen las metas establecidas en sus contribuciones determinadas a nivel nacional y en sus planes nacionales de adaptación (PNAD).

El programa hace hincapié en la colaboración con el sector privado, así como en enfoques de planificación y ejecución inclusivos y con perspectiva de género que beneficien a las comunidades más vulnerables que dependen de los recursos naturales.

Otro ejemplo es el proyecto mundial de Refuerzo de la Adaptación Agrícola (SAGA), que trabaja con los agricultores ayudándoles a adaptarse al cambio climático en tres países especialmente vulnerables a sus efectos: Côte d'Ivoire, Haití y Senegal. Lo hace del siguiente modo:

  1. genera datos y pruebas científicas sobre la vulnerabilidad y las opciones de adaptación en los sectores agrícolas;
  2. realiza intervenciones piloto comunitarias;
  3. elabora orientaciones sobre políticas;
  4. aprovecha los mecanismos de coordinación vigentes de lucha contra el cambio climático con miras a facilitar el diálogo entre los asociados locales, nacionales e internacionales.

Fuente: Galbiati, G.M., Bernoux, M., Yoshida, M. y Benni, N. (en prensa). Climate-related development finance to agrifood systems – Global trends 2000–2021. FAO. Roma.
https://doi.org/10.4060/CC8055EN-fig01

Ampliación de la financiación verde y para crear resiliencia al clima

La financiación para el clima es una parte fundamental de la agenda mundial para el desarrollo, pero la agricultura y la utilización de la tierra no siempre cuentan con una financiación adecuada. Entre 2000 y 2021, el apoyo financiero prestado a los sistemas agroalimentarios ascendió a 183 000 millones de USD, con unas contribuciones por valor de 19 000 millones de USD en 2021, lo que supone una disminución del 12 % respecto del año anterior. El análisis de las tendencias muestra que, aunque ha habido una tendencia positiva en términos absolutos, la tasa de crecimiento de la financiación para el desarrollo relacionada con el clima que se destina a los sistemas agroalimentarios está rezagada respecto de la media general, lo que se traduce en una reducción de la proporción de financiación asignada a los sistemas agroalimentarios en todo el mundo.

La FAO ayuda a los países a considerar distintas opciones de financiación y defiende firmemente la integración de las cuestiones climáticas en las políticas.

La FAO y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial

Desde 2018, la FAO ha prestado apoyo a más de 100 países en el diseño y la ejecución de 159 proyectos del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), con un valor total de 6 900 millones de USD. Estos proyectos están ayudando a los gobiernos a abordar los problemas críticos en la intersección entre los sistemas agroalimentarios, el cambio climático, la biodiversidad, la degradación de la tierra y las aguas internacionales. Su finalidad consiste en mejorar la productividad y los medios de vida agrícolas al tiempo que se impulsa la sostenibilidad de los ecosistemas.

La asociación entre la FAO y el FMAM aborda tanto la mitigación de los efectos del cambio climático como la adaptación al mismo, al evitar y reducir las emisiones de GEI y reforzar la resiliencia al clima. En los últimos cuatro años, desde el Uruguay a Uzbekistán, desde Kenya a Camboya, y desde Mongolia a Mauritania y México, el FMAM ha respaldado la gestión de 150 millones de hectáreas terrestres y marinas; ha restaurado cerca de 4 millones de hectáreas terrestres, y ha llevado más de 2 millones de toneladas de poblaciones de peces sobreexplotadas a un punto en el que los peces tienen tiempo de reproducirse para mantener los niveles de población. Los fondos también han respaldado medidas con las que se han mitigado más de 570 millones de toneladas de emisiones de GEI; dichas medidas han tenido consecuencias directas en la vida de más de 13 millones de personas.

La FAO y el Fondo Verde para el Clima

La FAO y el Fondo Verde para el Clima (FVC) siguen aumentando la escala de las inversiones en proyectos de lucha contra el cambio climático dirigidos a proteger los sectores agrícola, forestal y pesquero, y a fomentar su resiliencia. Esto permitió marcar un hito en 2022, cuando el valor de la cartera de la Organización financiada por el Fondo superó los 1 000 millones de dólares. Los proyectos se centran en limitar o reducir las emisiones de GEI y en ayudar a las comunidades vulnerables a adaptarse a los efectos del cambio climático. La FAO también aporta sus conocimientos técnicos a proyectos dirigidos por asociados del FVC.

A través del Programa de preparación, la FAO también ayuda a los países a acceder a los recursos del FVC para mejorar la capacidad de las instituciones nacionales de colaborar con el FVC y realizar la planificación de la adaptación y para desarrollar marcos de inversión para el clima.

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