Ante los rápidos cambios económicos, sociales y ambientales, los responsables de la gestión forestal y los usuarios de los bosques deben ser adaptables e innovadores. El cambio climático está exacerbando factores de estrés como los incendios forestales y las plagas, y la tensión entre los efectos de estos, por un lado, y el probable aumento futuro de la demanda de madera, por otro, implican que es necesario replantear la gestión de los bosques y las tierras y la actividad forestal. El cambio hacia una bioeconomía con cero emisiones de carbono, en la que la madera será un insumo muy importante, exigirá innovaciones en las etapas posteriores a fin de diversificar los productos y usos y aumentar la eficiencia. Las oportunidades que ofrece la renovada atención que se presta a la amplia variedad de PFNM en el contexto de la bioeconomía darán lugar a innovaciones destinadas a crear cadenas de valor y mejorarlas y a proporcionar oportunidades de medios de vida a, posiblemente, miles de millones de pequeños productores. Dada la diversidad y el aumento de las demandas, se necesitarán nuevas formas de gestionar las compensaciones entre la madera, los PFNM y los servicios ecosistémicos y de maximizar las sinergias entre los beneficios para el desarrollo, la biodiversidad y el clima.
Se necesitan urgentemente soluciones eficientes y pragmáticas a gran escala para impulsar una mayor adopción de las innovaciones. En el capítulo siguiente se muestra que la ciencia y la innovación ya están dando lugar a cambios rápidos en la actividad forestal, desde innovaciones en la recopilación de datos forestales hasta avances en las tecnologías de la madera, pasando por nuevos medios para organizar a los pequeños productores y ampliar su poder económico. En el Capítulo 4 se presentan estudios de casos sobre la introducción de innovaciones en una amplia variedad de contextos, y en el Capítulo 5 se describen cinco medidas facilitadoras, y las medidas específicas conexas, para aprovechar el poder de la innovación en favor de la conservación, la restauración y la utilización sostenible de los bosques. Cada vez está más claro que la innovación y su implementación eficaz serán fundamentales para garantizar el futuro de la actividad forestal en un mundo cambiante.